Chiara – Ejército, día 50.
Habían pasado casi dos meses desde que ingresamos al cuartel. Ya mi comienzo fue duro, pero nos fuimos adaptando poco a poco. Ruslana y yo nos hicimos cercanas, al ser las dos menores fue fácil relacionarme con ella. Soportó mis primeras noches de insomnio, viéndo cómo hacía malabares para ocultar la chaqueta de Violeta entre las pocas cosas que nos dejan conservar y burlándose de mí porque la cuido mas que a cualquier cosa en ese lugar.- Número uno, si algo le pasa a esa chaqueta... - suspiré – Quiero decir, pretendo conservar a mi amiga ¿sabes? Y número dos, también pretendo conservar mi vida, Ruslana. De verdad Violeta podría tratar de asesinarme mientras duermo si algo le sucede a esa cosa... – me reí, porque ya estaba bajo amenaza con la cuestión de la chaqueta de Violeta. A Ruslana le hizo gracia lo que le decía sobre Violeta, pero es porque de verdad no la conoce enfadada.
- Parece que tenéis una bonita amistad... - dijo bromeando con ironía - Yo no sé si alguna vez he logrado ese nivel de confianza con alguien – agregó pensativamente. Le respondí con una patada suave en una de sus piernas que esquivó con habilidad.- ¿Y que hay de mí, eh? – le dije haciendo cara de ofendida. En muy poco tiempo, ella y yo habíamos logrado estar muy unidas y nos teníamos un cariño sobreprotector entre ambas. La sentía como una hermana.
- Bueno, me refiero a antes de entrar aquí... Tenía un buen amigo cuando era pequeña, pero él se fue a vivir a otro pueblo y ya nunca más lo vi... - recordó con melancolía.
- Este lugar nos pone sentimentales ¿no crees? – le respondí, desde que todas llegamos aquí, siempre hacíamos mención a nuestros amigos, familia, personas que recordábamos, etc.
Es como si la lejanía de todo, de tu vida y tu entorno te hiciera repensar muchas cosas. Era común encontrar a compañeras llorando solitariamente en los momentos libres. Sucede que esos momentos de soledad eran prácticamente nulos, sólo si lograbas escapar un momento de los ojos de los oficiales a cargo tenías la posibilidad de estar sola por lo menos un minuto. Incluso nos tuvimos que acostumbrar a tomar duchas compartidas y vigiladas por los oficiales. Nos dijeron que eso era por nuestra seguridad, que en el pasado muchas soldados se habían suicidado mientras estaban a solas en los baños y que por eso ya no estaba permitido permanecer sola por tu cuenta. Era exasperante, pero luego te comienzas a acostumbrar porque realmente hay cosas peores aquí.
- Todos estamos igual – suspiró – Y Kiki, ¿dejaste a algún noviecito por ahí? – me preguntó con mirada pícara Ruslana.
- No, tonta – le contesté poniendo mis ojos en blanco.
- ¿De verdad? Yo realmente pensé que estabas enamorada de alguien y que por eso sufrías tanto aquí... Solo que, ya sabes... No quería hacerte sentir mal preguntándotelo directamente – me dijo con algo de timidez. Deseaba no entrar en tema, porque mi cabeza es una montaña rusa de confusiones cuando se trata de hablar sobre amor.
- Tú me has preguntado si tengo novio, no si estoy enamorada de alguien... - respondí mientras me arrepentía de lo que decía. ¿Por qué abres ese tema estúpido, Chiara?
![](https://img.wattpad.com/cover/372833132-288-k683675.jpg)
ESTÁS LEYENDO
PISTA 07 (KIVI)
FanfictionLa vida es como escuchar una canción, de repente el sonido puede cambiar bruscamente y tú, sencillamente, no puedes ignorar este cambio, porque podría ser el sonido mas hermoso que escuches en tu vida. Chiara Oliver, de 21 años, regresa a su hogar t...