Era viernes, solo tres días después que le entregue a mi jefe el archivo que contenía las expectativas de gastos de la Derby Enterprise, se estaba firmando el acuerdo en donde nos convertimos en proveedor casi exclusivo de ellos, el asunto era noticia en toda la organización, y mi jefe George Wright había sido felicitado públicamente por el dueño de la corporación - su padre- John Wright. Conocía la importancia que eso tenía para él, para su autoestima, el ser reconocido por su padre, el mismo que le había puesto en su cabeza cargas y cargas de presión, el poder sentir que esta vez logró llenar las exigencias de padre lo hacía sentir feliz, y sobre todo relajado. Había que aprovechar este momento, y me preparaba para ello.
A media tarde, entré a su oficina, llevando un café, sabía que a esa hora comenzaba a sentir cierta pesadez derivada de la intensidad del trabajo, "Felicitaciones jefe, toda la empresa está hablando de la firma del acuerdo con Derby" le dije mientras colocaba la bebida sobre su escritorio, Levantó la mirada y me sonrió, estaba muy feliz -y la gente cuando es feliz tiende a bajar las defensas y se vuelve vulnerable- "Tu ayuda fue fundamental en la negociación, me gustaría recompensarte, te lo mereces" me dijo.
Era el momento de jugar la siguiente carta, "No solo mi ayuda, la de Gloria también, ella fue la que nos proporcionó la información, sin ella no se hubiese logrado nada"
-Es cierto, dijo y se quedó pensativo como queriendo determinar cuál sería el curso de acción correcto en este caso, como si estuviese tratando de decidir cómo pagarnos nuestra ayuda.
-Por cierto jefe, Gloria y yo vamos a tomarnos unos tragos esta noche, aprovechando que mañana es feriado, me gustaría mucho que pudiese acompañarnos y así celebramos este logro. Rápidamente lo puse en una situación en donde por las circunstancias se le hacía muy difícil negarse a mi invitación.
-Pero ¿Tú crees que sea apropiado? ¿y si nos ven? estando tan reciente la firma y trabajando ella en Derby, no sé. Caviló
-No se preocupe jefe, conozco de un sitio muy agradable, discreto y en donde nadie podrá vernos, se lo aseguro, dejé eso en mis manos, respondí sin darle tiempo a pensarlo demasiado. De hecho nos podemos ir desde aquí mismo como a las ocho ¿Estamos de acuerdo?
-Está bien, después de lo que hiciste por mí y por la empresa no puedo negarme a la invitación, a las ocho nos vamos.
Al salir de la oficina le escribí a Gloria desde mi celular, "Listo, el pez mordió, a las ocho donde acordamos, ponte bella, esta noche dependo de ti, besos"
*****
Después de rodar unos 40 minutos desde el centro de la ciudad llegamos a la boîte, un lugar apartado, en donde destacaba el luminoso letrero "Le Chat Verrouillé", la decoración era estilo art deco, con vitrales que filtraban la luz y permitían un sutil juego de luces y sombras. En una mesa algo retirada estaba Gloria, que al verme levantó su mano y exhibió una gran sonrisa en su rostro
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Desmalezando en tacones
Ficção GeralClarisse era una mujer con cierto secreto, que había esperado buena parte de su vida para obtener lo que ella pensaba que le pertenecía en justicia, lentamente irá desarrollando su plan que transformará la vida de mucha gente, buscando la compensaci...