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MAX-

–Que harás esta noche– pregunto PJ a mi lado, estaba recostado sobre mi cama mientras que el estaba tumbado en el suelo.

–No lo se, realmente no me apetece la idea de salir, creo que solo me quedaré aquí– era mentira, iria a ver a Brad pero por obvias razones no se lo dije.

–Bien... Entonces tengo que irme, Bobby me espera– se levantó y se dirigió hacia la puerta, se despidió de mi y cerró de un portazo.

Después de unos minutos me levante para ducharme, entre al baño me despoje de mi ropa y entre en la regadera.

El agua fresca cayó sobre mi cuerpo relajandome un poco, en ese momento Brad vino a mi mente, lo imaginé frente a mi, desnudo, mientras yo observaba esa delgada cintura, esas curvas que me estaban volviendo loco.

El se acercó a mi y poso sus brazos alrededor de mi cuello para darme un beso mientras yo llevaba mis manos a sus caderas y las apretaba.

El beso se intensificó, lleve mis manos a su trasero y lo aprete, lo que causó un gran gemido en Brad.

Y cuando menos lo imaginé mi miembro ya estaba completamente duro y Brad ya no estaba.

Solté un gran suspiro y lleve mi mano a mi polla, limpie el líquido pre-seminal y comenze a bombear, gemidos roncos salían de mis labios.

Seguí bombeando durante unos minutos más hasta que por fin logre correrme sobre mi mano, con un gemido sonoro.

No puedo esperar por ver a Brad.

[...]

BRADLEY-

Era de noche, estaba repasando las últimas notas que tome en clase cuando escuche un tintineo proveniente de mi celular.

Tome mi teléfono para revisar de que se trataba y al encenderlo me di cuenta de que era un mensaje.

–Desconocido.
Hey Brad.
Estoy por llegar a tu habitación.

Bradley.
Como conseguiste mi número novato??.

–Desconocido.
Una chica me lo paso.
Estoy afuera, abre.

No respondi ese mensaje, me acerque a la puerta y al abrirla pude ver a Max recargado en el umbral de la puerta con una sonrisa coqueta.

–Entra, alguien puede verte– lo jale del brazo hacia adentro de mi habitación, estaba nervioso, muy nervioso.

–Tu cuarto es lindo y demasiado ordenado– dijo mientras observaba las hojas regadas sobre mi escritorio.

–Bien Max, a lo que viniste, tenemos que hablar sobre lo que pasó hoy– dije cerrando la puerta tras de mi, el volteo a mirarme y se acercó, tan cerca que podía sentir su respiración chocando contra la mia.

–Te gustó el beso Brad– pregunto rozando sus labios contra los míos–Por que a mí si, de echo me encanto– llevo su mano a mi nuca y atrapó mis labios en un beso fugaz.

Mis manos hicieron un recorrido por todo su pecho, subiendo hasta su cabello para tomarlo en pequeños puños y jalarlo.

Rompió el beso para pegar su frente a la mia y decir –Creo que no hay mucho que hablar Brad, a ti te gusto y a mí tambien– sus ojos me miraban con una intensidad inexplicable.

–Pero tenemos que acordar algunas cosas, sabes lo que dirán todos si se enteran de esto– dio un último beso antes de alejarse de mi y sentarse en la orilla de mi cama.

–Claro que lo se, pero, acaso importa lo que ellos digan– me senté junto a él y tome su mano, entrelazando nuestros dedos.

–Entonces no se lo diremos a nadie, pero no hagas que esto termine, quiero estar contigo – tomó mis caderas e hizo que me sentara sobre su regazo.

– Entonces será un secreto... Nuestro secreto– roze nuestros labios mientras el apretaba mis caderas con fuerza.

–Muero por ponertela ya Brad– este solo recibió un golpe en el pecho por mi parte.

–Imbecil– y sin más que decir iniciamos un beso que siguió durante varios minutos, hasta que Max tuvo que irse.

[...]

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𝙱𝙴𝚂𝙾𝚂 𝚁𝙾𝙱𝙰𝙳𝙾𝚂 | (𝙼𝙰𝚇𝙻𝙴𝚈) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora