En el poco tiempo que llevaba de vuelta en la ciudad, mi papá ya se había encargado de fastidiar mi existencia.Parecía no entender que ya no era el niño de hace cuatro años atrás. Había crecido, madurado, pero sobre todo ya había cumplido la mayoría de edad. No podía seguir intentando manejar mi vida como a él le plazca.
Había empezado la academia de policía. Tenía que hacer un año como mínimo obligatoriamente, después podía seguir trabajando en la comisaría si así lo deseaba aunque no eran esos mis planes.
Dentro de 6 meses empezaría también en la escuela de medicina. Un año obligatorio al igual que en la policía.
Teníamos dos horas de prácticas diarias con diferentes superiores, después debíamos patrullar para completar el turno.
Filadelfo e Isidoro también habían comenzado la academia conmigo, no entendía los motivos que tenían por hacerlo, pero gustaba tenerlos trabajando a mi lado.
Habíamos llegado a un acuerdo con Dan y sus amigas, haríamos patrullajes rotativos entre nosotros así no teníamos que estar alumnos nuevos o desconocidos.
Ese día me tocaba patrullar con Lexie, después de las practicas diarias la llame por la radio para juntarnos en el parking de comisaría.
Dan, Kylie y Lexie no debían asistir a las prácticas, así que patrullaban entre ellas el primer par de horas del turno.
-Buenas Gus. ¿Cómo estas tanto tiempo?- frente a mi, estaba James Gordon, mirándome con una gran sonrisa.
-¡Buenas James! Muy bien, gracias por preguntar. ¿Y tu como haz estado?
-Pues, por aquí todo ha estado igual, ¿Sabes? Pero es bueno que hayas vuelto, le das color a esta oscura comisaría.
-Muchas gracias hombre. Exageras, pero gracias.
-No exagero, es la verdad. ¿Quieres que patrullemos juntos?
-Ya tengo binomio, es Lexie Green.
-¡Oh! Bueno, podríamos arreglar para hacerlo otro día.
-¡Por supuesto que si!- me quede en silencio pensando que excusa poner. -Me voy porque Conway me espera en su oficina.
-Creo que el super no está en la comisaría todavía.
-Ah, si. Bueno lo esperaré ahí de todos modos.- comencé a caminar lo más rápido que pude. Subí las escaleras casi corriendo. Gordon venía detrás mío.
James Gordon era un policía muy amable que había conocido años atrás. Trabajaba en comisaría desde antes de mi viaje, tenía el cargo de inspector.
Siempre era muy amistoso conmigo aunque realmente sus intenciones eran algo más que una simple amistad, nunca lo había expresado pero era muy obvio.
Al llegar al segundo piso, recorrí los pasillos buscando la oficina de mi padre. Realmente no sabía cual era, solo había estado ahí el primer día que llegué a la comisaría y ya no lo recordaba con exactitud.
Gordon seguía detrás mío hablándome. No había escuchado una sola palabra de lo que decía desde que empecé a subir las escaleras. Solo quería alejarme de él.
Me caía bien, por ese motivo es que no quería rechazarlo a mi asquerosa e hiriente manera. Realmente no sabia hacerlo de otro modo.
Llegue a la puerta de una oficina, no sabía de quién era, pero en ese momento me importaba muy poco.
Abrí la puerta y entré rápido cerrándola detrás mío.
Respire profundo y me di vuelta.
Dentro, estaba Freddy observándome serio desde el asiento detrás de su escritorio y con la PDA en sus manos.

ESTÁS LEYENDO
Peligroso Deseo
Fiksi PenggemarGustabo, un joven de 22 años, vuelve a casa de su padre luego de estudiar por varios años en el extranjero. El regreso de su mejor amigo, revelaciones del pasado y su atracción por el pecado hecho hombre, lo llevaran a sacar su lado oscuro, sumergi...