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Lee Felix consigue el trɑbɑjo de ɑyudɑnte de dirección en unɑ grɑn empresɑ de publicidɑd. El único ɑl que tiene que rendirle cuentɑs es ɑ su ɑrrogɑnte, egoístɑ, sɑ́dico y pervertido de su jefe. ¿Tirɑrɑ́ lɑ toɑllɑ o se ɑcostumbrɑrɑ́ ɑl...
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Cuando Felix abrió los ojos por la mañana, Hyunjin estaba de medio lado en la cama con la cabeza apoyada en su mano, observándolo con una sonrisa alegre.
─ Buenos días, hoy me desperté antes para asegurarme de que no salieras corriendo ─ dijo Hyunjin.
─ Buenos días...
Felix había vuelto a pensar en sus acciones y ahora no sabía que hacer. No sabia como comportarse delante de Hyunjin.
Por suerte (o desgracia) Hyunjin sacó su teléfono y les hizo una selfie.
─ ¿Qué haces? ─ dijo Felix cubriéndose demasiado tarde.
─ Una foto para ponerla de fondo de pantalla. También saqué unas cuantas mientras dormías, es que estabas tan guapo. Esta la puse de bloqueo.
─ Borra todo eso.
─ De eso nada, ahora son mías.
─ Dame eso ─ Felix intentó quitarle el teléfono, pero solo logró ponerse encima de él.
Cuando lo alcanzó ya lo había bloqueado y lo único que podía ver era una foto de Hyunjin haciendo un corazón con los dedos al lado de él durmiendo con la boca medio abierta.
─ Dime la clave.
─ Oh no, la privacidad de la pareja es muy importante.
─ ¿Pareja?
─ Somos pareja ¿no? Las parejas tienen sus fotos de fondo de pantalla. ¿o eso ya no se lleva? Nunca he tenido novio.
─ Novio... ─ Felix bajó la mirada, observando la foto del teléfono de Hyunjin, todo eso era una locura para él y lo único en lo que podía pensar era en que Hyunjin salía extremadamente guapo.
─ ¿Que te pasa?
Hyunjin le puso las manos en las piernas, que descansaban a ambos lados de su cuerpo. Acarició sus mulsos y subió por el pantalón del pijama a cuadros que llevaba puesto para acariciarle la espalda por debajo de la camiseta.
Tuvo que incorporarse un poco pero Eso le sirvió para acercarse más a Felix. Le quitó el teléfono de las mano y se metió entre sus brazos. Felix no sabía como reaccionar. Nunca se había imaginado tener a Hyunjin de esa manera.
Terminó abrazándolo, Hyunjin no llevaba nada de cintura para arriba y su piel estaba fría y suave.
Vestido con sus trajes estaba guapísimo e imponente, pero verlo medio desnudo por la mañana y con el pelo desordenado era como ver a un ángel caído.
Hyunjin le acariciaba la espalda, le clavaba los dedos de arriba abajo mientras olía su cuello. Felix le sujetó la cara, se miraron unos instantes, sonrieron, no pudieron evitarlo y luego se besaron.
Hyunjin no tardó en tomar el mando y al poco rato lo tiró contra la cama. Lo hicieron varias veces, cambiando de posición, hasta que ninguno pudo más.
