CAP. 04

1.1K 123 26
                                    

«Esto es lo que querías, ¿no cabrón?»

Katsuki echa la cabeza hacia atrás, dejando salir una exhalación perezosa por sus fosas nasales.

—¿Estás bien? —Shouto, que está sentado a su lado, lo mira con esos ojos heterocromáticos fijos en su rostro.

Bakugou desvía la mirada hacia otro lado, y cruza los brazos sobre su pecho. No está bien. No cuando literalmente tiene al culpable de sus problemas de insomnio sentado a su lado, luciendo una perfecta polera azul con un short deportivo, dejando su pálida piel expuesta ante él, que no podía evitar bajar la mirada de vez en cuando para apreciar mejor su figura.

¿¡Hah!? ¡Claro que estoy bien, Icyhot! —gruñe seriamente, evitando el contacto visual con el otro.

—Entiendo, pero te ves muy cansado —refuta a su lado el omega, y Bakugou puede sentirlo acercarse un poco más a él—. Pareciera que no has dormido bien.

—«¿Y por quién crees que es, idiota?» —piensa Katsuki para si mismo, ignorando la repentina cercanía del mayor— ¡Tsk! Estás alucinando.

—¿Lo hago?

—¡Sí! Tal vez tu puto ciclo de celo te descompuso la vista —espeta. Bakugou no espero tener el rostro de Shouto justo frente al suyo, inspeccionandolo con ojos entrecerrados— ¿¡Qué haces, imbécil!?

—Lo siento, realmente creí que pude haberme dañado la vista.

—¿¡Estás verdaderamente idiota o qué!? —Bakugou no sabe en qué momento simplemente dejo de respirar por la cercanía de Shouto hacia su persona.

—Bakugou, estás morado.

—«¡Ah, una mierda!»

Decide incorporarse del tatami rápidamente, decidiendo que era momento de hacer cualquier mierda menos mirar al otro.

—¡Deja de molestar, bastardo de las mitades! —mete las manos a sus bolsillos y se desplaza por la sala, directamente a la salida de la casa.

—¿Te vas? —interroga Shouto, aparentemente confundido.

—No, ya acepte la invitación de tu hermana para cenar —reflexiona, pero sigue caminando a la salida—. Simplemente daré una vuelta por ahí mientras está la comida, no soporto estar aquí dentro.

—¿Quieres que te acompañe? —Shouto se levanta, caminando hacia él sin esperar una respuesta— Te mostraré las flores que cuida mi madre.

Bakugou quiere negarse, mandarlo al diablo o cualquiera cosa que lo tenga lejos, pero no hace absolutamente nada de lo que planea, pues los ojos duales del omega ya lo están mirando directamente, esperando su respuesta, esperando una afirmación.

Y Bakugou se maldice así mismo cuando responde.

—Entonces mueve tu trasero, siento que me ahogo aquí adentro.

—¿Tienes problemas para respirar?

No lo decía literalmente, pero la respuesta de Shouto era obvia y decide no gritarle nada y mejor salir de la casa, sin siquiera molestarse en esperar al mayor.

Puede oír los pasos de Shouto detrás de él. Intenta ignorar a su alfa, que literalmente le pide un poco de acercamiento con el otro, no importa como, pero exige algo que él no es capaz de entender, así que sólo lo ignora y se distrae mirando sus pies aplastar el pasto perfectamente podado.

—De hecho, ¿Por qué viniste, Bakugou?

La repentina pregunta de Shouto lo distrae lo suficiente para que su atención recaiga en el semi albino.

Todoroki es... ¿¡Un Omega!?;   BakuTodoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora