Capítulo 3- Me he encariñado con él.

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Ivy.

Llevaba ya 4 días con la familia Malik. Me sentido cómoda con ellos, me hacían sentir que era parte de la familia y me daban muchos ánimos. Había veces que sentía que mi mundo se me iba encima, pero ya fuera Trisha o Safaa me daba ánimo.

Por las tardes solía sentarme en un sillón o salir al jardín y ver hacía la nada. Me encontraba haciendo una tarea o platicando y me iba a mi mundo. No pensaba en nada más que en lo mucho que extrañaba a mi tío Thomas. Mamá sabía lo mucho que me estaba doliendo todo aquello y era por eso que por la mañana y noche me hablaba para saber cómo me encontraba. Me costaba trabajo expresarme abiertamente con ella debido a la distancia. Sentía de igual forma cierto rencor, ¿por qué no me había dicho sobre que era la emergencia? ¿qué tanto le costaba llevarme con ella?

 Hoy era viernes, otro día de escuela. Me puse el uniforme de gala de la escuela. Era una falda entablada de colores obscuros, playera blanca y suéter de tonalidades parecidas. Me dejé el cabello suelto y solo me eché un poco de rímel.

Baje las escaleras con el mismo pesimismo que cargaba desde días atrás. Saludé a todos con una media sonrisa sin llegar a los ojos. Safaa parecía la única que no entendía del todo lo que sucedía…, y de cierta forma agradecía eso. Ella me pedía que juagara con ella o le contara sobre “chicos” y yo complacía esos pequeños caprichos porque me hacía dejar de pensar en lo sucedido.

Después del desayuno las chicas y yo nos fuimos al colegio. Yasser nos llevaría como había hecho siempre. Primero dejaría a Doniya, que iba a la Universidad, y después a nosotras.

Al llegar a mi casillero Xime ya me estaba esperando con una media sonrisa. Me abrazó con fuerza, era aquel tipo de abrazos que demuestran muchas cosas. Había hablado con ella durante la semana sobre la muerte de mi tío y ella me había apoyado mucho. Lo había conocido varias veces y pensaba que era una persona agradable.

—Ánimo amiga —me dijo ella.

 Gracias… Zayn trata de que no piense en eso —al momento me maldije por decir aquello sin pensar, ya sabía lo que vendría.

—Zaaaayn… —me dijo un ligero codazo. Aunque no me agradara hablar mucho sobre él, agradecía que hubiera cambiado de tema.

—Cálmate…, solo es un amigo —abrí mi casillero y saque mi libro para nuestra clase de Ciencias.

— ¿Ya pensaste en lo que te dije acerca de Zayn?

—Pues… —suspiré cancinamente—. Tenías razón en algunas cosas.

—Ósea que… —se quedó unos segundos pensando—. ¡Estas enamorada de Zayn!

—Algo así… te diré que le tengo mucho aprecio —dije mientras caminábamos.

— ¿Cuándo tendré el placer de conocer a mi cuñado?

—No… no lo sé… —ni siquiera había pensado en eso.

—Pues yo lo quiero conocer —bufó.

Llegamos al salón y nos sentamos en los últimos lugares del fondo. Como era costumbre en el profesor Meyer nos puso a hacer el cuestionario de algunas páginas. Estaba tan cómoda contestando las preguntas cuando de la nada me quedé viendo hacía enfrente.

¿Le había confesado a Xime que estaba sintiendo algo por Zayn? ¡Solo tenía semanas de conocerlo!

Pero tenía que admitir que había sido muy considerado conmigo. Todos los días hablábamos de cualquier cosa, me incluía en sus planes junto con el resto. Y por supuesto que lo quería, había sido de las pocas personas que se habían ganado mi cariño en tan poco tiempo.

Una Mentira, Un Error, Un Amor {Z.M}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora