Disclaimer

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Todo ocurre por algo.

La vida siempre te puede desgraciar la vida en mil formas, arrebatando aveces cosas o personas. Aveces porque, sin saberlo, eran las que más te dañan. Otras veces porque era necesario. Y otras, para que otras cosas más tengan que pasar.

Ese era el enigma de la vida. Hay cosas que podrían ocurrir. Desapariciones que podrías sufrir. Muertes que te podrían destrozar.

Pero ante lo malo, siempre hay ahí un rayo de luz y esperanza.

Mientras vidas mueren, otras llegan. Cuando se pierde algo, obtienes otras.

Dónde hay maldad, hay bondad.

Todo siempre es un equilibrio. Y es por eso qué ellos dos existieron.

Dos seres que simbolizaban el equilibrio de la vida. El Jin y el Yang. El primero un ser de luz, tan brillante como la pulcraridad de la vida pero con un corazón triste, oscuro y lleno de soledad. Y el otro, un ser que refleja oscuridad y caos, tan letal como sus ataques pero tan bondadoso y alegre.

Ambos siempre con un contraste en si mismos, pero que eran el equilibrio de bueno y malo. De perfección e imperfección. Una perfecta definición y la verdadera perfección.

Y es por eso que paso lo que pasó.

A pesar que cualquiera hubiera deseado cambiarlo. Aunque alguien no lo desearía tuvo que pasar.

Les han arrebatado la vida...

—¡Fue culpa suya!



A pesar de ocurrir la muerte del equilibrio y que ambos perecieran, la definición de su armonía les dio una oportunidad.

¿Es curioso no?

Pero quizás en esa vida no tuvimos esa oportunidad porque era la primera vida, una en la que nada tenía que ser feliz.

Posiblemente en la siguiente sí.

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Mi lindo Luz Nocturna •Toothcup• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora