Un día antes del cumpleaños de Ashley y Albert ésto era lo que pasaba:
— Billie y Cherry estaban en las gradas del estadio en las que habían estado hace más o menos un mes. Tomando nota de todo lo que se les ocurriera,con varias botellas de Pepsi a su alrededor y muchas hojas hechas pelota.
— Cherry,ese día se veía algo interesante. Tenía su pelo muy descuidado,y hasta parecía no importarle. Sus labios no tenían su habitual brillo. Estaban muy secos. Tenía ojeras. Y llevaba un pantalón de mezclilla,azul con varias manchas de, quizá ketchup y una sudadera negra.
— También, Cherry a cada rato se comía las uñas,o se alborotaba más el pelo,o se mordía los labios,sin razón aparente.
Sólo habían pasado ocho días desde que no se veían y Cherry parecía otra persona.
Billie pensó que podían cambiar muchas cosas en ocho días.
— ¿cómo te fué?—
— ¿qué?— Cherry preguntó, arrugando sus cejas para luego tomar una calada de su cigarro.
— Me dijiste el otro día que estarías ausente porque estarías de viaje con tu hermano. ¿ Cómo te fué?
— me fué bien, supongo.
Billie clavó sus ojos en los de ella.
— ¿supones?—
— sí,eso dije.—
Durante las siguientes dos horas,no pasaba nada interesante al no ser por la música de los noventa que tenía un anciano puesta en una bocina, a unos metros de las dos chicas.
Eso,hasta las cinco de la tarde que Cherry avisó que se tenía que ir.— ¿quieres que te lleve? Ashley me dejó su auto de manera limitada hasta las siete. Tengo tiempo de sobra.
— ¿y porqué querrías llevarme? —
— ¿pasar tiempo de calidad?—
— ¿quieres pasar tiempo de calidad, conmigo?
— ¿porqué nos respondemos con preguntas?
— porqué tú no sabes nunca responder a mis preguntas.
Billie se quedó callada mirando hacia los autos que pasaban. Estaban ya enfrente a la carretera.
Ella si sabía, sólo que no quería decirle. Aunque bueno,si las miradas hablaran,ella ya tendría todo un libro lleno de poemas para Cherry.— ¿Te llevo?—
— No voy a mi departamento pero,me puedes dar un aventón.
Estaban ya casi llegando a la calle dónde vivía Cherry Larson cuándo ésta, informó a Billie que girara a la derecha y que en la siguiente esquina, detuviera el auto.
Esa calle le parecía conocida a Billie.
Sin tráfico,sin casi casas y muchos árboles en cada lado de la carretera.
Luego de unos segundos, recordó porqué le parecía haber ido por ahí.Esa calle conducía a un hospital de salud mental. Claudia trabajaba ahí.
Al detener el coche,Cherry le dió las gracias a Billie por hacerle el favor. Y cogió sus cigarrillos.
— ¿fumas mucho?—
— no,sólo cuándo tengo ansiedad.
— ¿tienes ansiedad ahora?
— no,tengo ganas de fumar.
A pesar de su aspecto desaliñado,Cherry seguía oliendo a vainilla.
— ¿sabes lo que hay luego de esa curva,cierto?—
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MON AMOUR INFINI
De TodoMisma ciudad. Misma universidad. Mismas clases. Y casi casi, la misma calle. Su hilo rojo quería unirlas a toda costa,o al menos lo intentaba. Billie Eilish estudia artes visuales y está en cuarto año en la universidad de artes en San Francisco. Ell...