Los Gatos Guerreros #2 - La Tensión de los Clanes: Cielo Nublado

¡Capítulo Extra!

Hola a tod@s!

Sé que este libro me salió mucho más corto de lo que esperaba, pero en compensación por eso traigo un capítulo adicional para el que sea que disfrute leyendo a mis gatos sufrir  ;)

Esta vez, del POV de Estrella de Lodo Y TAMBIÉN una parte con Pelaje de Carbón.

Si no gustan leerlo, no se preocupen. Hay revelaciones en este capítulo, pero igualmente las voy a incluir en los próximos libros (Así nadie se pierde de nada)

¡Espero que les guste tanto como le gustó a mi gata!

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Estrella de Lodo

Estrella de Lodo se despertó agitado, dando un salto brusco para alejarse de su guarida al mismo tiempo que dirigía su mirada al cielo nocturno y nublado que pronto traería mucha nieve a las montañas. La cueva del Clan de las Montañas Altas no era un lugar cálido cuando nevaba.

– Y todos se van a enfermar ahora que no tenemos curandera.– Masculló, recordando las palabras del gato estelar que lo había visitado en su sueño.

Hoja de Manzana ya se lo había advertido antes: Hoja Escarchada era importante para la supervivencia del clan y más ahora que llegaba la estación sin hojas. Si los gatos se enfermaban de tos verde y esta se expandía, un líder con poca experiencia en la medicina no iba a poder salvarlos.

– Estrella de Lodo.– Una gata atigrada gris se le acercó con impaciencia, interrumpiendo sus pensamientos.

– ¿La encontraron? – Consultó Estrella de Lodo, buscando con la mirada a la gata calicó.

La guerrera agachó levemente la cabeza antes de maullar que no, con la mirada puesta en el exterior del campamento, tan concentrada en buscar algo que no iba a encontrar. Se veía cansada por la patrulla... aunque más desesperanzada que agotada.

– Creí oler sangre... Manto Manchado cree que solo estoy exagerando, pero tengo la impresión de que a Hoja Escarchada le pasó algo.– Dijo Pelaje de Carbón, moviendo ansiosamente las patas.

– Sé que todos piensan que fue Manto de Luz... ¡¡Pero en el nombre del Clan Estelar!! ¡Ningún gato va a atacar a mi clan porque si! – Rugió el líder, agitando su cola atigrada por el suelo rocoso. Ya ningún gato quería hacerle daño al Clan de las Montañas Altas desde hace lunas. Y aunque quisieran, ¡Ahora estaban más preparados que antes!

No por nada había pasado tantas lunas de su vida siguiendo los consejos de los líderes anteriores. El clan nunca más se iba a permitir ser imperfecto o verse débil frente a los demás y todos entendían eso a la perfección... excepto la única gata que ahora estaba desaparecida. Hoja Escarchada no tenía lo necesario para ser curandera en el Clan de las Montañas Altas. No era sabia, tranquila y nunca curaba excelentemente a los heridos. Simplemente no era la curandera que el clan necesitaba y hasta el Clan Estelar parecía saberlo.

– El frío blanco congelará lo que han creado...– Había dicho Hoja de Manzana hace muchas lunas. Era un mensaje del Clan Estelar y el entonces curandero no estaba seguro de si se refería a un gato o literalmente la estación sin hojas le ganaría al clan.

Y todavía no estaba seguro de a que se referían sus antepasados con eso, pero habían tomado las precauciones necesarias para el caso de que fuese el único gato relacionado con el frio en todo el clan: La entonces cachorra de menos de seis lunas, Pequeña Escarchada.

– Si entrena conmigo para ser una curandera, no va a ser capaz de destruirnos con sus propias garras.– Hoja de Manzana había sonado demasiado tranquilo esa vez. Como si de verdad Hoja Escarchada estuviese bajo control con él.