Love Countdown [MilkLove]

Capitulo 8

Love observó a Milk, quien aún sostenía su celular sin hacer movimientos aparentes. Mientras se acercaba más al sofá donde Milk se encontraba recostada, vio cómo, después de mencionar a la persona al otro lado de la línea, dudaba por un instante en si deslizar su dedo para responder. Sus ojos se entrecerraron, y su expresión reveló una mezcla de sorpresa y duda antes de finalmente contestar.

"¿...Ciize?" dijo Milk con su voz un poco áspera, supuso Love que era debido al agotamiento del largo día, el cual se podía ver ya reflejado en sus movimientos un poco más lentos.

La más bajita vio a Milk acomodarse un poco, intentando encontrar una postura más cómoda mientras el ángel procedía a sentarse en la mesita de centro, a unos pocos centímetros del sofá.

"Hey, Milk." la voz al otro lado de la llamada era suave y apacible, un marcado contraste con la tensión visible en Milk al escucharla. Love se inclinó un poco con dirección a la mujer más alta con el fin de escuchar con mayor atención, sus alas invisibles temblaron ligeramente a causa de la curiosidad.

El rostro de Milk mostró un destello de reconocimiento al escuchar la voz al otro lado de la llamada, pero también una leve incomodidad que no pasó desapercibida para el ángel.

Milk se acomodó un poco más en el sofá, quedando ahora sentada, con una mano frotando su sien en un intento de aliviar la presión del día. Sus ojos, normalmente llenos de energía, ahora lucían apagados. "Ciize, son cerca de las 2 de la mañana. ¿Qué necesitas?" su tono era más frío de lo habitual, reflejando no solo el cansancio sino también la barrera emocional que parecía haber levantado entre ella y la persona al otro lado de la línea.

Love la miró sorprendida. Aunque no sabía con exactitud quién era la mujer, ciertamente no esperaba una actitud tan fría por parte de Milk hacia otra persona. "No debes ser así con tus conocidos, Milk." le regañó Love, frunciendo ligeramente su ceño. Sabía que la humana no podría escucharla, pero, aun así, la preocupación se reflejaba en sus ojos.

Después de las palabras de Milk, hubo un breve silencio entre las dos mujeres y el ángel, que solo se mantenía de espectador, apenas interrumpido por la respiración suave que llegaba desde el otro lado de la llamada. "Lo sé, lo siento por la hora. Acá en Corea también es bastante tarde. Es solo que... te he extrañado."

Love quedó sorprendida ante tales palabras. Era un acertijo poder ver las conexiones de Milk sin la posibilidad de acceder a sus registros debido al Aegis que aún bloqueaba todo sobre ella. Quizás, esta podría ser una pieza importante del rompecabezas para entender el aislamiento emocional de Milk.

Observando las expresiones de la pelinegra, Love notaba la incertidumbre y el malestar que se reflejaba en sus ojos, como sombras que amenazaban con consumirla.

"Han pasado años, Ciize. La vida sigue." dijo Milk, con su voz temblando ligeramente, un rastro de dolor escondido bajo la aparente firmeza. Love pudo ver cómo Milk se aguantaba el impulso de suspirar, con su pecho subiendo y bajando en un ritmo lento y controlado.

"Sí, lo sé." respondió Ciize, con un tono calmado siendo un bálsamo para las heridas abiertas de Milk.

"Probablemente no nota tu tono indiferente, Milk..." le comentó Love, deseando poder intervenir de alguna manera. Aunque sabía que Milk no era capaz de escucharla, la frustración se acumulaba en su interior. Era evidente que Milk estaba tratando de protegerse, de no mostrar vulnerabilidad.

Love se sentó al lado de Milk, como si su presencia pudiera ofrecer algún consuelo. Observó cada pequeño gesto, cada cambio en la expresión de Milk, buscando pistas, tratando de entender mejor a la mujer que había jurado ayudar.