2.

28 11 19
                                    

El tiempo pasó realmente rápido al punto que no se había dado cuenta que la otra semana ya era el evento, donde tendría que bailar... ¡Frente a toda la universidad!

—¿Por qué nadie me dijo que iba a ser así?

Obviamente no recibió respuesta ya que estaba hablando solo en el baño, mientras se mojaba la cara y trataba de sobrevivir un día más. Se matriculó en el peor momento porque rápidamente todo se puso de cabeza y no entendía nada.
Primero que todo, Schulz le estaba exprimiendo el alma como si fuese un limón maduro. Él fue quién le dijo que bailaba bien y que sería parte de los pequeños cisnes pero no entendía por qué lo corregía tanto por cada mínima cosa como si fuese un chiquillo que tiene sus zapatillas por primera vez, pero debía aguantar, decidió hacer su vida del ballet y tener profesores como él era parte del trabajo.

Medio día y ya estaba más muerto que vivo, le gustó el horario de la tarde porque luego de bailar horas seguidas podría irse a su casa y dormir en su deliciosa y suave cama envuelto en su manta pesada pero no, Schulz dijo que no, que estaría en la mañana y ahora tiene que ir a clases generales por la tarde cuando apenas puede estar de pie. Aunque esté acostumbrado a bailar también tiene un límite para su energía y no es como que su profesor acepte que guarde un poco, como dijo antes, lo estaba exprimiendo.

—Levántate peliteñido.

La voz femenina y fastidiada que escuchó lo hizo abrir los ojos mientras estaba tirado en el suelo, todos se habían ido y solo él estaba exhausto, ¿se metió a una universidad donde nadie era humano? Imposible que no estén cansados, hasta podría empezar a dudar si bajó su rendimiento físico.

—¿Te lo tengo que repetir cada vez que me hables? Es natural y no, déjame, el piso está frío.

—Awww, Cenicienta no resiste una práctica y generales. No me estoy preocupando por ti, todos tenemos que estar presentes para empezar a decorar.

—¿Decorar?

—Ugh, olvido que eres nuevo y que no estuviste aquí el año pasado, como nadie te explicó me veo obligada a ser amable. Mira Cenicienta, no es solo un evento de ballet sino que en la universidad también tendrán actividades, vendrán personas de otras universidades a vernos bailar y a participar ya sea en actividades o comida y como somos estudiantes de generales debemos de ayudar a los otros a decorar, nos toca ayudar a los raros de Ingeniería y a los de Bellas Artes.

—¿Es una broma verdad?

El rostro de Agatha fue suficiente respuesta para decirle que no era alguien de estar haciendo bromas y menos ante la persona que no parece agradarle en su totalidad. Solo escuchó como la chica bufó antes de irse caminando de ahí y dejarlo tirado en el suelo estirado como una estrella.

Frotó su rostro fastidiado y tomó la fuerza de voluntad que le quedaba porque física definitivamente no tenía, y se levantó para cambiarse y caminar hasta Bellas Artes donde asumió que ocuparían poca ayuda ya que claro, era una facultad de arte y sabía que quienes estuvieran ahí serían unos expertos decorando, probablemente solo ocuparían ayuda en mover cosas dado con lo perfeccionistas que son, era culpable de todas formas, entendía ese sentimiento al haber nacido en una familia llena de artistas de distintas artes de todo tipo, según su madre es un largo pero muy largo linaje y parecía ser heredado, si pidieran su opinión es algo extraño pero no puede discutir contra la sangre, ¿verdad? Solo sabía que su bisabuela fue la mejor bailarina de ballet y quiso ser como ella al ver las pinturas que hizo su bisabuelo de ella, incluso podía sentir el amor en esa tela lo cual desde pequeño le daba anhelo de tener algo así.

Al llegar vio como muchos corrían de un lado a otro y claro, no entendía nada porque ni siquiera el mismo director se dignó a explicarle que no era un recital de la academia sino que involucra a la universidad entera y ni para qué hablar de las razones de la creación de esto, peor aún.

Il Sistema di AllégroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora