El siguiente día empezó algo incómodo debido a la mirada intensa de la chica a su lado quién comía un sándwich de jamón con bastante enojo. Todo sin quitarle la mirada ni un segundo de encima, ni parpadeaba.
—Naty… Ya te pedí perdón por olvidar que tenía que salir contigo… ¿podrías dejar de mirarme como si quisieras sacarme los ojos con una cuchara?
—No, porque, ¡ese no es el problema aquí! El problema es que le metiste la lengua hasta el pulmón a Devin y se que te gustó porque mientras comías tus papas no dejabas de suspirar, ¡no te conviene! Puede ser lindo pero creeme que no es tu tipo.
—Nena se que lo conoces desde que estabas muy pequeña ya que siempre ha sido amigo de tu hermano pero… ¿por qué tan reacia a que salga con el? Tengo edad suficiente para salir con quien quiera y aunque no conozca bien a Devin puedo estar seguro que no es tan malo como lo dices.
—Vas a ser uno más de su larga lista de relaciones que no va a terminar bien, llámame loca pero Devin es la definición de “fuck boy”, ha salido con varias personas sin importar su género o si son alfas y siempre les rompe el corazón.
—¿Algún tipo de rumor qué inventó Grisel? No siento que Devin sea ese tipo de persona…
—¿Qué lo dice? ¿Instinto omega? Yo he visto muchas veces como terminan sus relaciones y no es algo en lo que quiero que te metas.
—Mira, aprecio que te preocupes pero ni mi madre me cuida tanto respecto a esto, él no me va a destrozar el corazón como a otros en caso de que suceda, no soy tan frágil como lo aparento.
La chica hizo un puchero quedándose callada mientras su amigo albino caminaba hacia la academia para iniciar su práctica con Pavel quién claro, lo recibió con una sonrisa que no le agradó del todo.
Volvió a prepararse junto a Agatha y a Theo para invitarlos a almorzar con ellos donde comía con Natasha, no iba a mentir, quería ser más cercano a ellos y sentía que Naty era algo tímida para hablar con ellos así que pensó que estaría bien juntarlos y aligerar esa tensión en el ambiente. Agatha aceptó inmediatamente para su sorpresa y Theo aceptó después aunque parecía estar pensando, no le tomó la suficiente importancia.
Evidentemente no hubo mucho avance al bailar con Pavel, su toque lo incomodaba mucho al punto que se desconcentraba y se caía varias veces. Las discusiones no pudieron faltar y sus insinuaciones también pero tuvo la pequeña sensación que no lo estaba mirando, sino a alguien más.
Luego de los regaños de su profesor y su poca coordinación como pareja parece que finalmente pudieron hacer sus papeles como correspondía, cosa que lo dejó aliviado.
Finalmente el tiempo de almuerzo llegó luego de estarlo esperando toda la mañana, se estaba muriendo de hambre y parecía no ser el único. No desayunar parecía algo común entre la academia. Los tres omegas fueron a comprar su comida y buscaron a Natasha quien ya estaba en el punto donde siempre comían, el área abierta bajo un árbol pero a los dos nuevos les pareció extraño.
—¿Vamos a comer ahí? ¿No se llenaría de insectos? No quiero tener hormigas en mi pantalón…
—No hemos tenido ningún problema hasta ahora, tranquilo Theo. Confía en mí.
El omega algo inseguro se acomodó la ropa y siguió al albino quién iba hablando con su mejor amiga hasta que llegaron donde la chica más baja. No se le vio muy feliz pero Vincens terminó haciéndole una súplica a base de sus expresiones. Un suspiro fue suficiente respuesta para que todos se sentaran y empezaran a comer.
—Sé que no soy muy unida a ustedes como Vincens pero… ¿puedo preguntarles algo?
—Tú misma te hacías a un lado, se que tengo cara de mala persona pero no me niego a nuevas amistades, Theo es el tímido a pesar de hablarle primero a Vincens la primera vez que lo vio. Pregunta sin pena alguna.
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Il Sistema di Allégro
RomanceLa elegancia, delicadeza y belleza pueden atraer a cualquiera incluso al mas escéptico. Una vez eres atraído por ella es imposible alejarte de ella. Se sabe que el ballet no es gusto de todos pero los pasos de ese omega albino puede cautivar a cual...