NO LE TENGAS MIEDO A LA SOLEDAD

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Capítulo 4: No le Tengas Miedo a la Soledad

ACLARACIÓN: Este capítulo es una transcripción y reflexión de un video del canal de YouTube "Dimensión B", titulado "¿Qué hacer si me siento solo?". Me pareció interesante abordarlo de manera escrita y llegar a aquellas personas que no conocían de su existencia.

¿Qué hacer si me siento solo?

Si te sientes solo o sola en este momento, te pido que leas atentamente lo siguiente: nada es al azar o aleatorio en nuestras vidas. No hay coincidencias, solo señales...

La soledad no debe ser solamente una sensación desoladora, puede ser también una aliada poderosa, todo depende de nuestra perspectiva y de tener una intención específica durante los periodos de la misma. Todo ser humano pasará por periodos de soledad en su vida, pero estos no durarán para siempre. Aprender a estar solo puede ayudarnos a evaluar nuestra vida, a reflexionar, a meditar, y a poner proyectos en marcha que no serían posibles si estuviésemos todo el tiempo en compañia. Por eso, te pido que veas este mensaje como una señal que te puede dar la iniciativa para comenzar a aprovechar los periodos de soledad con mayor consciencia de transformación y fortaleza.

Deja ir esa carga... ese miedo... y abrazala. Deja ir esos pensamientos de que hubieses preferido evitar estos momentos y sentirte así. Recuerda que este periodo de soledad no está ocurriendo por casualidad o por accidente.

Es aquí que quiero introducirte al concepto del Universo... a cómo funciona esta energía que nos compone a todos. El Universo (puedes llamarlo como tu quieras) funciona a través de ciclos que se repiten en nuestra vida, así como el día y la noche, como cada mes, como cada estación del año, todo en nuestra vida es un ciclo de aprendizajes y experiencias. Por esto, debes entender que este periodo de soledad NO DURARÁ PARA SIEMPRE; nada dura eternamiente más que la eternidad misma... De ahí en fuera, nada está hecho para durar para siempre. Por lo tanto, este periodo terminará en algún momento, no lo olvides.

Reitero, este periodo de soledad no tiene que ser sufrido. Estos periodos no llegan a nuestra vida para ello. Todo lo contrario, llegan a nuestra vida para que nos transformemos, tal cual una oruga elige una esquina solitaria de un árbol para convertirse en una bella mariposa. Ese capullo, en ese momento, no debe ser molestado ni perturbado.

Si en este momento el Universo (o las circunstancias actuales de tu presente... o las causalidades de tus acciones, entre otros aspectos en el caso de que no creas todavía en una energía superior que ordena y sincroniza todo) te pide estar en soledad, estar en ese "capullo"... relaja (o al menos intentalo) y fluí, pues esta etapa te ayudará a "transmutar", a hacer una metamorfosis de tu alma. Esto quiere decir que este periodo de soledad es para ayudarte a transformarte. Es un llamado del Universo a convertirnos en una nueva y mejorada versión de nosotros mismos.

RECORDEMOS: LA SOLEDAD NO LLEGA PARA HACERNOS SUFRIR, LLEGA PARA HACERNOS MÁS FUERTES.

La Perspectiva de la Soledad

Para este punto, querido lector, capaz que digas: "Pfff, es fácil decirlo así, pero no tienes ni idea de lo que estoy viviendo... No sabes por qué estoy solo..." [...] Y si, tu reflexión y aclaración es totalmente válida y cierta. Sin embargo, debemos salir de ese molde de excusas subconscientes y entender que existen muchas razones por las cuales una persona llega a sentirse sola. Sea cual sea, la soledad nos brinda PERSPECTIVA, no lo olvides. Nos brinda una herramienta única para mirar hacia atrás y observar nuestras vidas desde nuevos puntos de vista que antes ni hubieses imaginado ni considerado.

Solamente a través de la soledad podemos evaluar, contrastar y comparar nuestra vida actual y pasada, para proyectar (visualizar) a futuro la vida que deseamos. Solamente a través de estos periodos es que podemos entrar en reflexión y en introspección real. Es aquí que tenemos la oportunidad de ENCONTRARNOS A NOSOTROS MISMOS.

Este AUTOCONOCER solo se da aquí, en soledad. Pues, al vivir el día a día rodeado de diversos estimulos, sean amistades, familia, personas en general, actividades o tareas -que si bien es algo bonito y confortante porque podemos compartir con los demás y además brinda un sentimiento de orientación y propósito -, terminamos viéndonos a nosotros mismos a través del reflejo que los demás proyectan de nuestro ser. Por ende, no podemos conocernos a nosotros mismos a través de los demás. Nadie es capaz de conocerte en tu totalidad más que tú mismo. Pero ese es un viaje que debes emprender tu solo (en compañia con el Universo claro está).

El Miedo a la Soledad

Pero Joaco, "¿qué hago si le tengo miedo a estar solo?"

Sin duda, yo he formado (y a veces lo sigo siendo) parte de esto, el miedo a la soledad es algo que, como primera instancia, nos hace sentir inseguros y, a veces, genera autocompasión excesiva ("pobre de mí, siempre me quedo solo"; "nadie me quiere"). Pero, eventualmente, deberemos limpiar nuestras "lágrimas" (que muchas veces son necesarias en un principio) y levantarnos nuevamente.

Una pregunta clave para este punto es preguntarnos con total honestidad: ¿para qué le tengo miedo a estar solo? [...] Como veraz, el "para qué", en vez del "por qué", funciona como un cambio de paradigma. Me explico: al cambiar el "por qué" (que suele servir como queja o disconformidad con el presente) por el "para qué" (que sirve para preguntarnos qué reto o desafío debemos superar o qué sentido tiene lo que nos sucede en este momento para nuestra mejora personal y, por ende, espiritual), se genera un cambio enorme en nuestro ser y en nuestra perspectiva de la vida: dejamos de ser exclavos de la queja, para ser aprendices honestos y valientes de la vida, y aceptar las cosas tal cual son.

Si eres una de esas personas que, como yo, ha sentido o siente miedo a estar solo, te invito a que le preguntes al Universo el "¿para qué"... y ten paciencia, sus respuestas llegarán cuando menos te lo esperes. A su vez, ten en cuenta que lo más seguro es que se te ha llamado a vivir este periodo para que puedas convivir y confrontar tus miedos, iniciando con el miedo a la soledad. Recuerda, todo ser humano debe aprender a convivir consigo mismo (además de estar en sociedad, obviamente). De esta manera, se generará un equilibrio interno que se transmitirá al exterior. Recordemos que lo de adentro se proyecta hacia afuera y viceversa. Por consiguiente, la única forma de conectar realmente con nuestra esencia más pura, es decir, con nuestro espíritu (el canal por el cual el alma se manifiesta en nuestro cuerpo físico y mental) es a través de la soledad.

Te invito, en este punto, a que llames a tus ángeles o seres protectores (por decirle de alguna manera) y a la Divinidad (o Universo, o como te guste llamarlo) para que te acompañe y te dé fuerza, pues nadie nunca está completamente solo (tal vez sí en un plano físico-material, pero no en el astral-espiritual). Pídele, entonces, que te enseñe a estar solo y descubrir el "para qué" estás viviendo todo esto: ¿qué se te quiere enseñar? [...] Y, ya verás, que, paulatinamente, el miedo a la soledad se ira alejando de ti.

Te daras cuenta que, detrás de ese miedo, no hay nada de que preocuparse. Es como cuando tenemos miedo a la oscuridad y, solamente cuando nos adentramos a nuestra casa con las luces apagadas, podemos darnos cuenta de que no hay de que temer.

El Poder del Silencio

Supongamos que hemos superado por completo el miedo a la soledad y que estamos ya sumergidos de lleno en este proceso de transformación. Lo siguiente que necesito comunicarte es que aprecies el PODER DEL SILENCIO. Solamente estando solos podemos realmente apreciar el silencio (y la magia detrás).

En el silencio encontramos muchisimo autoempoderamiento. Es aquí que podemos llevar a cabo meditación, oración o enfocarnos al 100% en una cosa, pues, realmente en silencio, es donde la concentración plena (también llamado "Estado de Flujo") surge. Es en la quietud de nuestras mentes donde las distracciones se disipan y el sentido de vivir en el momento presente se agudiza, ampliando así nuestra atención y contemplación.

Solamente en soledad podremos apreciar de manera profunda todos los detalles que enriquecen nuestro vivir. Es en esa tranquilidad del momento presente (del regalo) que nuestros pensamientos adquieren CLARIDAD. En este estado, podremos evaluar nuestra vida de una manera mucho más consciente y verdadera.

RECUERDA: La soledad es un llamado para convertirnos en una mejor versión de nosotros mismos. Abrazarla con gratitud y valentía nos permitirá transformarnos y encontrar así el verdadero sentido de nuestra existencia.

VIVIR LA VIDA SIN REMORDIMIENTOS NI CULPASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora