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-Debes estar bromeando Olga, porque demonios tengo que ser yo- un irritado Shiro miro furiosa a Olga que tenía la mirada serena mientras tomaba una taza de té –bueno, eres lo suficientemente fuerte y temerario, como para ir a la guarida de un demonio y salir vivo-

La noche anterior cuando interrogaron al ángel caído llamado Raynare, Shiro y Olga llegaron a obtener mucha más información de lo que pensaban obtener sobre los demonios que habitaban la ciudad, sobre todo quienes eran realmente los encargados de la ciudad, si se podría llamar así.

ya que el territorio que muchos dicen pertenece a los demonios, en realidad no era cierto, solo fue una forma de llamar la atención y hacerse notar en el mundo sobrenatural, la verdad era que el territorio estaba aún afiliado al panteón sintoísta, pero por la falta de dioses que deseen bajar al mundo terrenal y proteger su territorio, los reyes demonios tuvieron que llegar a un acuerdo para que la ciudad fuera habitada por los demonios, como condición principal fue que solo vivirían los demonios afiliados a dos clanes, los Sitri y Gremory, cualquier otro demonio habitando la ciudad rompería el trato y los obligaría a abandonar su territorio.

Antiguamente el territorio fue protegido por los sacerdotes de los templos dedicados a los dioses, pero con la era moderna del hombre, muchos empezaron a abandonar su trabajo dejándolo deshabitado, la iglesia que fue siempre rechazada de Japón, logro crear algunas iglesias en varias ciudades a través del tiempo, con el cambio de mentalidad en los japoneses, las iglesias fueron permitidas, pero no apoyadas.

En un principio los de dioses sintoístas estaban en contra de que la iglesia estuviera en sus territorios, pero al ver como ellos defendían a sus seguidores, decidieron dejarlos habitar sus ciudades, cuando los dioses sintoístas hablaron de que los exorcistas peleaban contra los enemigos de la iglesia siendo la mayoría de especies fantasmales que amenazaban a su gente, dejaron de molestarlos y permitieron que vivieran ahí.

Aun cuando los exorcistas pertenecían a otra facción, seguían siendo humanos y la mentalidad humana gritaba que el mundo era suyo, los dioses sintoístas sabían bien que el dios principal de la facción bíblica es un ser bondadoso, uno dios que ama a los humanos, sobre todo.

Su amor por los humanos era tan grande que se enfrentara a una existencia más poderosas jamás creadas, ellos tenían un respeto claro por ese dios, ya que, a pesar de ser de otra facción, nunca decidió doblegar u obligar a los demás dioses a seguirlo, aun cuando era el más poderoso de todos los dioses que vivían en el mundo.

Con la mentalidad de que los humanos son realmente los gobernantes del mundo, los dioses sintoístas aceptaron esa mentalidad entre ellos, aun cuando muchos de sus seguidores podían decir que ellos crearon el mundo, la verdad era que ellos nacieron del mundo.

Pero la primera raza inteligente que les dio la bienvenida fueron los propios humanos, que, a pesar de ser débiles y fáciles de manipular, tenían algo dentro de ellos que los hacia especial, un don único de la humanidad que solo lo tenían ellos.

Así que mientras que fueran humanos y no dañasen a sus tierras, ellos permitirían que vagaran por sus territorios, una mentalidad que adoptaron los demás dioses del mundo, pero no permitirían que otras razas invadieran sus territorios.

Los cuales podrían dañar gravemente a sus seguidores y adoradores, una decisión unánime de los dioses que habitaban el planeta.

Esta fue una teoría creada por Shiro y Olga, con las vagas respuestas de Raynare a sus preguntas. Que para la sorpresa de los demás caídos que observaban su tortura, ella revelo servir al ángel caído Kokabiel quien estaba en contra del líder actual de los caídos, Kokabiel había mencionado este trato con anterioridad al sentirse molesto de que los demonios quisieran tomar territorio en el mundo proclamándose superiores a las demás razas.

Fauces del InfiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora