Capítulo 23

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*Jaden*

-Es la elegida.

Estamos en un bazar buscando la caja perfecta para los recuerdos. En realidad ya debería de estar casi terminada pero debido a las circunstancias de todas estas semanas hemos atrasado este momento.

Más vale tarde que nunca.

-¿No es un color muy llamativo? - pregunto mirando detenidamente la caja.

Es amarillo chillón con caras de gatos.

-Que va- dice dándole vueltas orgullosa de su elección- es perfecta.

Acepto a duras penas. Me hubiera gustado que fuera naranja.

-¿No te gusta?

Por el sonido de su voz se que le ha encantado. No quiero que la cambie por mí.

-Si, me gusta y nos la quedaremos- rozo sus manos al tomar la caja.

Por el rabillo del ojo, noto como salta de alegría.

Queda un mes para terminar verano, y aún así siento que solo llevo dos días aquí. Al principio me daba miedo volver y pensar que nada volvería a ser igual.

Y no fue igual; fue mucho mejor.

Supongo que no hay ningún camino, ni un mapa, ni nada parecido que te haga tomar la decisión correcta.

Solo hay una cosa que siempre hará que cualquier decisión que tomes sea la ideal. El corazón.

Salimos andando de la tienda rumbo a casa. Allí tenemos todas las cosas que guardaremos por ahora.

-Es una pena que hayan desaparecido todas las demás cajas- se posiciona a mi lado.

-¿Desaparecido?- la observo de reojo. Frunce el ceño.

- Yo tengo una azul muy bonita- sigo hablando.

Gira la cabeza sorprendida.

-No me puedo creer que las tengas tú- dice sorprendida- yo pensé que las había perdido cuando me mudé.

-Tendré que devolvertela algún día- aseguro.

Mentira, jamás se las devolveré.

-En realidad prefiero que te las quedes tu- pestañea- yo las perdería.

-Como todas las cosas-murmura pensando que no la escuché. Me hace reír.

-Que exagerada- pienso.

Minutos después llegamos a mi casa. Entro saludando pero nadie responde.

-¿Leo? - pregunta. Deja los zapatos en la entrada.

-Ni lo sé ni me importa- subo a la planta superior- ¿Por qué te quitaste los zapatos?

-Es de mala educación llevarlos puestos en una casa que no es tuya- explica subiendo detrás mía.

Un papel cuelga de la pared de la habitación.

-No volveré hasta dentro de dos días. El más guapo de la casa- leo la nota despegandola de la pared.

-¿Cómo que el más guapo? Esto no lo he escrito yo- digo gracioso. Amaia estalla en carcajadas al entender lo que quise decir.

Me tumbo en la cama y ella se sienta a mi lado.Algunos mechones se le salen de la coleta.

-¿Por qué tienes el pelo más claro?- Me acerco tocando suavemente un mechón y dejándolo tras su oreja.

-En verano se me aclara-explica- y me pongo cremas que hacen que se ponga más claro.

-Ahh- es lo único que respondo.

Solo sé túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora