XXIII

73 5 2
                                    


                         Mauricio

Allí mi mundo se derrumbó por completo, es como si mi cerebro en vez de bombear aire bombeara espontáneamente agua como un océano pacífico de problemas que poco a poco se iba ahogando de incomodidad, ¿Era tan obvio que estaba inseguro de su pareja?   Todo era tan raro estos últimos días que ni un índice de cosas que se podría concentrar en ese tiempo corto, ahora su misma vida se resumía en, comer, vomitar, escribirle a Álvaro con respuesta o sin respuesta, torturarse el solo sin nadie por detrás y nada más, planeo eso al futuro cercano para ser amado. De un día para otro no me enamore de López fue cosa de años atrás cuando apenas era un adulto joven estudiando periodismo en esa universidad de cuarta en concepción, la vez que nunca podría olvidar que se estaba obligando a estudiar más de 5 horas sin parar, a la hora de salir de su habitación en el living de la casa de sus padres en la que aún seguía viviendo ver una figura antes mencionada en las conclusiones con su hermano, un hombre un poquito moreno, con el pelo rizado tanto que se los definía, una sonrisa encantadora y una carisma impresionante solo con esa descripción me basto para reconocerlo la primera vez, al presentarme con el que cursaba cuarto medio para mi suerte  solo senti una curvatura en mi pecho y mucha presión infringida, mi sangre y rostro se tornaron un poco mas rosa para mi tono de piel tanto que tuve que irme rápido cortando todo lazo, después de ese día solo pensé y pensé acostado y mientras estudiaba.

Rondaba por mi cabeza con frecuencia ese rostro y personalidad de ese chico, ¿Francisco acaso estudia en un liceo de modelos o que? Me dije yo a mi mismo porque a Francis no lo aceptarían. Cambiando un poco ese pensamiento que en su tiempo me dio risa solo me detuve a pensar cuantas veces vi Álvaro con Francis en ese tiempo, siempre era casi lo mismo ellos en el sala de la casa o en la cocina hablando cosas de weon de secundaria que no lo quieren en su casa, a veces me integraba a la convivencia y a otras no, porque opto por quedarme callado para no pasar pena con los amigos flaites de Francisco, si "amigos" eran varios que no recuerdo sus caras por tanto tiempo que paso desde esos años, pero eran bastante inmaduros y burlones tanto que me intimidaban a mi que era un fracasado universitario.
Cada semana cambiaba de amigos hasta solo quedar como 5 que solo recordaba a Álvaro y a su hermano que se veía por encima que era también introvertido pero todo lo contrario... Una vez tuve que preguntar si eran hermanos porque Álvaro era bronceado y tenía el pelo rulo y Gonzalo era tan blanco que parecía que tenía anemia y como chino no se cómo describirlo, pero no parecían hermanos como yo y Francisco.

Me hundí en mis pensamientos hablando conmigo mismo de más estupideces de mi adolescencia en esos segundos de la incomodidad de la pregunta, de nuevo me transporte al  ahora, donde estoy en la espada y la pared con una pregunta que espera ser respondida con certeza.
Yo sé que Francisco tampoco es un estúpido con el tema de Álvaro, siempre López a Sido "apegado" para no decir enamorado para dejar el beneficio de la duda, siempre lo ha seguido cada cosa que hablaba Francis estaba de acuerdo, era como un lame botas a lo extremo tanto que se volvió su mejor amigo y acompañante de esas noches oscuras con desesperación en los faroles de la ciudad, todo de Álvaro gritaba " oh estoy enamorado de francisco, me lo quiero coger wow, quiero casarme con el" pero yo mismo me privaba de esos pensamientos tan retro gradas pensando de igual manera que yo mismo estaba dando tiros al aire por algo que no era cierto y señalando con el dedo cuando no tenía un testimonio, aunque la verdad estaba tan enamorado ahora mismo de Álvaro para darme cuenta de la realidad, que lo que sobre pienso demasiado y desconfío tanto que me privó de respuestas confiables de afuera de mi mundo sicótico.

—yo mismo me he dado cuenta hace tiempo que nada en el ha estado bien cuando estoy cerca— hizo un gesto de un poco de asco mientras se dirigía al mesón con ganas de seguir hablando—a veces es incómodo estar con el ¿Cachai?  Me trae desconfianza y es como " es el pololo de mi hermano" y me da más rabia aún que esté así coqueteando indirectamente.

El paseo de tus mismas lágrimas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora