Un baile
—Hola, lamento la demora —me siento frente a Bastian quien lucía una camisa blanca y pantalones rectos azul marino.
Al parecer no soy la única que fue a cambiarse, su rostro se veía fresco y ya no era el Bastian apagado de esta mañana. Este chico tenía vibras de príncipe azul, es el típico que ves muy pocas veces en la calle y cuando lo ves te quedas hipnotizada con su belleza y elegancia.
—Por ti esperaría el tiempo que sea necesario —sonríe— a propósito, te ves hermosa.
—Gracias.
—¿Te arreglaste para mí?
—Por supuesto, no puedo permitir que vuelvas a verme como lo hiciste esta mañana.
—Aun así estabas hermosa.
Los meseros nos traen el almuerzo, converso de diferentes temas con Bastian, sin duda es un chico con el que puedes hablar de absolutamente todo sin aburrirte, casi había pasado media hora y es ahí cuando aparece Milo.
—Bastian, que gusto verte —lo saluda Nathan— Astrid, guapa como siempre —me sonríe y le devuelvo el gesto.
Me tomo un segundo para observar a Milo, quien no paraba de textear en su celular.
Así me lo pone difícil el muy idiota.
Ellos se marchan a la mesa de al lado y quedamos solos nuevamente Bastian y yo.
—¿Puedo preguntarte algo ahora que estamos más en confianza?
—Claro, pregunta todo lo que quieras.
—¿A qué se debe tanta rivalidad entre Milo y tú?
—¿No habíamos hablado de eso ya?
—No esperas que me conforme con aquella poca información que me diste.
—Eres algo curiosa —sonríe.
—Demasiado.
—Como ya te dije anteriormente Milo y yo nos conocemos desde que somos niños, crecimos juntos, como si fuéramos familia, éramos muy amigos, para ser sinceros estábamos demasiado unidos, aún más de lo que es con Nathan, yo conocía sus más grandes secretos y él los míos.
—¿Qué sucedió con esa amistad? —indago curiosa.
—Cuando entramos a la universidad hicimos un pequeño círculo social, ahí estábamos Milo, Nathan, Bella y yo, con el paso del tiempo me enamoré de ella, nos hicimos novios, pero luego ella me confesó que siempre estuvo enamorada de Milo.
—¿Bella? —inquiero, esa fue la chica que llamó a Milo el día de mi cumpleaños.
—Sí, Bella Carson, estudiante de diseño de modas y pianista. Comenzamos a salir cuando yo cursaba el tercer año y a finales de curso terminamos la relación debido a que ella estaba saliendo con Milo a escondidas.
—Wow, ¿en serio? —parpadeo asombrada.
—Sí, me dolió mucho la traición por parte de ambos, ella nunca me dijo que quien le gustaba era Milo, porque sabía que él estaba con alguien más, así que era casi imposible que se fijara en ella y, él —hace una pausa y suspira— él solo se dejó llevar por un calentón, nunca la quiso de verdad, ella nunca le importó realmente, su justificación siempre fue que estaba pasando por un mal momento y no midió las consecuencias.
—Ahora lo entiendo, debe ser difícil que dos personas a las que quieres te traicionen de tal manera.
—Luego de eso los dos tuvieron un intento de relación, pero Bella se dio cuenta de que él jamás sentiría algo real por ella y que solo la utilizaba para olvidar a alguien.
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Tácticas para enamorar a Storm
RomanceAstrid Sherman, hija de un respetado Duque, acaba de entrar a la universidad de bellas artes más prestigiosa del mundo, dispuesta a cumplir su sueño de ser una gran artista. Luego de un brusco cambio en su vida, Astrid decide comenzar a vivir nuevas...