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PDV Chiara

La conversación con Cayetana me había dejado fatal, me esperaba cierto rechazo de su parte pero no que hablara de esa forma tan empática conmigo. Por primera vez me sentía comprendida por alguien y las ganas de llorar habían estado presente desde el segundo en el que escuche de su boca que ella ya me había perdonado.

Cayetana me contó cómo habían sido aquellos años y me dió la tranquilidad de que si bien para Violeta había sido duro al comienzo ella había podido reponerse y ahora mismo estaba bien. También me dejó claro que no intentara buscarla que si bien estaba bien para ella no sería tan fácil volver a verme.

La verdad es que la reunión con ella había ido increíble por eso es que la invite a cenar conmigo. Igual me venía bien sociabilizar con alguien y a ella hacerme aquel interrogatorio que sabía que se moría por hacerme, al fin y al cabo aunque Tana fuese la menor siempre había sido sobreprotectora con Violeta.

Antes de salir a cenar llame a Ruslana para asegurarme que en casa estuviese todo bien y para avisarle que no me esperara  para cenar.

Rus era un pilar fundamental en casa y la verdad es que no se que haría sin ella, los niños la adoraban y yo también. La verdad es que era la compañera ideal.

- Venga Tana, vamos - le dije a Cayetana mientras íbamos al bar.

El trayecto fue en bastante silencio, pero no era incómodo, parecía que todo estaba en su lugar, se sentía extraño pero a la vez como estar en casa.

En cuanto entramos al bar, nos sentamos y pedimos, el interrogatorio no tardó en llegar. No tarde en reírme y es que Tana no sabía disimular ciertas cuestiones. Hablamos un poco de todo  la verdad, incluso me preguntó por mis hermanos y eso me dejó súper blandita, no solía hablar con nadie, a pesar de llevar muchos años en Barcelona no me había hecho amigos, solo la tenía a Ruslana.

- Yo también quiero preguntarte algo Tana.. -Dije con suavidad y justo en ese momento nos trajeron la comida, luego de agradecerle al mozo la mire.

-Dime cariño- Dijo con suavidad

- ¿Es ella no? La dueña de los cuadros es ella. - Estaba casi segura pero necesitaba confirmarlo.

- La respuesta no la necesitas, Chiara...

- Cayetana yo sé que no tengo derecho a nada pero... sus cuadros son oscuros, ella no pintaba oscuro.- Ella me miró confusa y tuve que explicarme- Viv... Violeta siempre se ponía horas a explicarme lo que significaban los colores y las técnicas y tal, ella siempre me decía que lo mas importante era la iluminación porque así como en la vida en los cuadros aunque sean tristes siempre hay un poco de luz.

- No te sigo Chiara- Me dijo sin entender por qué mi semblante había cambiado.

-Que creo que Violeta está intentando autoconvencerse de que está bien pero en realidad no lo está. No hay luz en sus cuadros ... Es como si estuviese resignada. Y Violeta no es una persona que se resigna ¿Me entiendes? - Le dije gesticulando bastante y muy implicada en la situación, no entendía como estaba sintiendo aquella presión en el pecho pero dolía.

- Cayetana lo siento - Suspiré y bebí un poco de mi copa- Se que he hecho las cosas fatal pero si va a estar cerca aunque yo no pueda verla no puedo omitir estas cosas, no quiero que pienses que estoy metiéndome en su vida porque se que allí no hay lugar para mí pero no me pidas que simplemente omita estás cosas. - Ella me escuchaba atentamente y sonrió levemente cuando termine-

- Nunca voy a entenderte Oliver... Yo también lo venía pensando pero es que es muy difícil lograr que Violeta suelte palabras, ella se ha cerrado en banda con ciertas cosas y no hay forma de llegar a ella.- Dijo visiblemente afectada y yo hice un pucherito porque tampoco sabía que decir, De repente se me había ido el apetito  y las ganas de pasármelo bien.

La luz que te he quitado - kiviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora