reencarne en el mundo de Naruto pero no fue como esperaba!

Primer Capítulo: Renacer en un "mundo en paz"

En una noche despejada, un joven de 20 años, llamado Ryota, se encontraba en una colina observando un fenómeno meteorológico raro. Las estrellas brillaban intensamente, y los meteoros surcaban el cielo, creando un espectáculo impresionante. Fascinado por la vista, Ryota se sentía afortunado de presenciar algo tan grandioso. Sin embargo, su suerte cambiaría en un instante.

De repente, un meteorito más grande de lo normal se desvió de su curso y cayó directamente sobre él. El impacto fue inmediato y devastador, y Ryota dejó de existir en ese momento.

Ryota se despertó en un lugar completamente blanco, sin suelo, sin cielo, solo un vacío infinito. Frente a él, una figura imponente se materializó: un dios con una expresión entre aburrida e irritada.

"Has muerto," dijo el dios con voz tronante, "pero tengo el poder de reencarnarte en cualquier mundo que desees."

Ryota, aún en estado de shock, rápidamente respondió, "¡Quiero ir al mundo de Naruto y ser del clan Uchiha!"

El dios levantó una ceja, visiblemente irritado. "¿En serio? ¿Otro fanático de los Uchiha? ¿Por qué todos quieren ir allí?"

"¡Es mi sueño!" insistió Ryota. "Por favor, señor dios."

El dios suspiró profundamente. "Muy bien. Te enviaré, pero no será en la época en la que transcurre la historia principal. Irás a la época de Boruto. Nadie se preocupa si esa línea temporal se altera o si tomas protagonismo y opacas a Boruto."

"¡No! ¡Por favor, no! ¡Esa época es aburrida!" Ryota imploró, intentando razonar con el dios. "¿Qué hay de los grandes héroes y las emocionantes batallas de antaño? Mi rabia por estar atrapado allí probablemente hará que despierte el Mangekyou Sharingan."

El dios hizo oídos sordos a sus súplicas. "Quejas, quejas... Qué fastidio. Te quejas más que un ninja sin chakra." Y sin más preámbulos, levantó su mano y una luz cegadora envolvió a Ryota.

Ryota se despertó de repente, no como un adulto, sino como un bebé. Sus nuevos sentidos lo abrumaron, y apenas podía enfocar su visión. Gente desconocida hablaba a su alrededor en un idioma que ahora le era familiar: japonés.

Observando sus manos diminutas y sintiendo la fragilidad de su nuevo cuerpo, Ryota comprendió lo que había sucedido. Había renacido en el mundo de Naruto, pero en la era de Boruto. Pronto descubriría que era cuatro años menor que Sarada Uchiha, la hija de Sasuke y Sakura.

Desde su cuna, Ryota observó con una mezcla de resignación . Este era un nuevo comienzo, y aunque no era la época que había deseado, estaba decidido a hacer su propio camino en este mundo de shinobi.

Bueno resignación entré comillas.

#### Punto de Vista de Sakura

Unos días después del parto, Sakura  observaba a su recién nacido con preocupación. El bebé, al cual había decidido llamar Akai por el tono carmesí de sus ojos, siempre parecía estar molesto y lloraba mucho más de lo que recordaba que lo hacía Sarada a su edad.

"Akai, cariño, ¿por qué estás tan inquieto?" murmuraba Sakura mientras lo acunaba en sus brazos, tratando de calmarlo. "Tienes una vida tranquila y amorosa por delante, pequeña, así que no hay razón para tanta frustración."

Akai tenía una piel suave y pálida, con mechones oscuros de cabello que ya comenzaban a crecer. Sus ojos, de un profundo color carmesí, miraban al mundo con una intensidad que sorprendía a Sakura. A pesar de su apariencia angelical, su ceño fruncido constante y sus llantos frenéticos indicaban que algo no estaba bien.

En la mente de Akai, antes conocido como Ryota, una avalancha de quejas resonaba constantemente. *¿Por qué me enviaste aquí, dios idiota?* pensaba con frustración. *Este cuerpo es tan débil y pequeño. No puedo hacer nada. ¡Y además, esta época es aburrida! ¡Ni siquiera está Naruto en su mejor momento!*