𝙴𝚕 𝙳𝚒𝚊𝚛𝚒𝚘 𝙳𝚎 𝙳𝚊𝚣𝚊𝚒 𝙾𝚜𝚊𝚖𝚞

Capítulo 23

No podia explicar el sentimiento que crecía en él, era raro, tanto que incluso podía afirmar estar enfermo, pero no podía decir certeramente de que padecía.

Suspiro cansado, estaba de regreso de una nueva misión, últimamente tenía demasiada, en especial las que tenían que ver fuera de Yokohama.

—¿Tienen todo listo?

Preguntó a sus subordinados quienes asistieron en afirmacion, Chuuya sonrio complacido por la respuesta, sin duda tenía subordinados eficientes.

—Bien. Apenas lleguemos deberán deshacerse de la evidencia.

Llevo una de sus manos a su pecho, le dolia de una manera inentendible y difícil de explicar, era un pinchazo que lograba estremecerlo y preocuparlo, aun no sabía que era pero tampoco tenía a quien preguntar, Kouyou era una beta por lo que no sabría responder y Mori no era una opccion, ese tipo planeaba matarlo de sobre explotación.

Suspiro confundido, quisiera tener amigos (de preferencia que no sean idiotas) y pedir consejos.

❂✿❂

Estaba feliz, hiba por su tercer mes y todo estaba llendo bien. Hiba regularmente a la ADA a llevar el almuerzo hecho por Ango para Oda, incluso aveces salía al parque con los niños y Ango a pasear. Y enserió, enserió agradecia que todo estuviera llendo bien, pero le dolían las caderas y las piernas, además, la espalda lo mataría.

—¿Estas seguro de que es normal?

Preguntó preocupado a Mori quien resoplo divertido y asintio.

—Si, tus pechos deben crecer por que te estas preparando para la lactancia, pero tranquilo, no crecerán demasiado; si fuera una omega femenina el cuento sería distinto.

Dazai suspiro, Mori sonrio al ver que todo estaba llendo bien, esperaba que todo siga asi durante el resto del embarazo y Dazai siga estando seguro lejos de la port mafia.

—Oh, por cierto, en la agencia hay una chica que te conoce, se llama Yosano y siempre insiste en que le hablaste de mi.

Un poco nervioso Mori asintio, había olvidado ese detalle.

—Yosano antes trabajaba para mí, pero no funcionó, ella no estaba preparada para tanto y termine por sacarla tras pedirle a Fukuzawa el favor de que se hiciera cargo de ella.

—Oh, ¿y como sabe de mi?

—Creo que hable con ella de ti, en ese tiempo estaba emocionado de encontrar un sucesor capaz, pero no te preocupes, Yosano puede saber que estuviste en la port mafia, pero no te puede juzgar.

Dazai asintio comprensivo, estaban en una casa que el mayor había comprado exactamente para tratar a Dazai, a sus propias palabras no quería arriesgar su seguridad.

—¿Cómo van las cosas?

—Bien, no hay tantos enfrentamientos o peleas, supongo que eso es bueno, además nuestra exportación a Rusia se a incrementado gracias a un interesado.

—Eso es genial, pense que pasaría años antes de que eso pasara, Rusia apesar del tiempo es un lugar muy difícil de acceder en exposición de armas.

—Si. Oh, Akutagawa tiene una alumna, aunque creo que quien es su mentor real es Kouyou.

—¿¡Enserió!?, ¿Cómo es ella?, ¿La entrena bien?

Preguntó emocionado haciendo a Mori sonreír melancolícamente. Dazai era aún un niño.

—Se llama Kyoka Izumi, es una niña muy callada y recerbada, además, ten por seguro de que Akutagawa está haciendo un buen trabajo entrenandola, y si, es amable con ella aunque creo que ella carece de sentido común.

Quiero conocerla, fue lo primero que pensó en decir Dazai, pero se detuvo antes de siquiera abrir la boca, no, no quería estar cerca de la mafia en ese momento, quizás lo mejor sería que se conocieran después.

—Bueno, creo que eso a sido todo; te acompañaré a pedir un taxi a casa.

Dazai asintio y siguió al medico luego de ponerse su sudadera nuevamente, la prenda cubrían su cabello gracias a la gran capucha.

Caminaron un poco en silencio antes de llevar a la calle donde Mori detuvo un auto y dio unas indicaciones, aunque Dazai esperaba seguro de que amenazó al conductor.

—Cuídate, Dazai-kun... ¡Oh! Por cierto, creo que esto te será útil.

Dijo extendiendo una libreta que para Dazai fue fácil reconocer, era la misma que le había regalado Oda meses antes, sonrio agradecido.

—Lo mismo digo, Mori-san.

Ambos se despidieron y Dazai finalmente subió al auto marchándose. El mayor suspiro, las feromona de Dazai eran un poco abrumadoras por lo que tuvo que asegurarse de que el conductor era beta y pagó una gran cantidad para que fuera por un camino seguro.

—Elise.

Llamó y a su lado apareció una niña de cabellos dorados que sonreia.

—¿Pasó algo Rintaro?

—Creo que Dazai debería comenzar a armar un nido, ¿crees que sea algo bueno?

—Creo que debería ser Dazai quien tendrá la necesidad de hacer uno en unos días.

Mori asintio de acuerdo y llamó a uno de sus subordinados para que pasara a recogerlo.

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Apenas llego al departamento se apresuró a llegar al baño, últimamente le era difícil controlar su vejiga y aunque sabía que era gracias al embarazo se sentía a avergonzado de estar la mayor parte de su día en el baño y en la cama.

Suspiro aliviado al ver el baño de la casa desocupado y entró, Ango que venía detrás de él no pudo evitar reírse en voz baja de las complicaciones de Dazai, pues debía admitir que cuando lo vio correr tan apurado pensó que quizás algo malo había pasado; no lo diría en voz alta, tampoco lo admitiría como si fuera fácil, pero le preocupaba Dazai, él se estaba tomando demasiado bien el embarazo, siempre hablaba de su bebé y hacía planes para ambos en el futuro.

La verdad es que quisiera que nada saliera mal y que como hasta ahora, Dazai no se encuentre ni de casualidad a Chuuya, pues sabía de boca de Mori que últimamente esra buscando más de lo normal a Dazai. Debía admitirlo, aunque sonará cruel la idea de deshacerse del adolescente peli naranja cruzo por su mente más de una vez, aunque estaba seguro de que pasa lo mismo con Mori y Oda.

Seguramente más se le notaba a Mori, después de todo es quien más lo ve de los tres.