Enamorado de un Homofobico

CAP 55

- Ugh~ Ya vasta me duele mi culo invencible. - escondió su rostro el la almohada.

Acaba de despertar que se había desmayado al parecer, no sabía ni qué horas eran.

- No exageres, eso no decías hace un par de horas.

- Cállate! Mejor asme comida, tengo una perra ambr... - el beso sobre sus labios lo sorprendió. - Y eso por qué!

- Si dices una grosería te daré otro, y si no me haces caso te cojere hasta que te desmayes. - se levantó de la cama colocándose los pantalones que se encontraban tirados.

- ESO NO ES JUSTO! - Se levantó con rapidez Pero le pasó factura el movimiento brusco.

- ¿Hay una ley que será injusticia? -

- Si! La de los pedófilos, de abuso a menores y maltrato infantil! -

- Está bien. - tomo unos boxer que se encontraban a un lado y ayudo a vestirlo. - Demandame si lo deseas. - acarició sus piernas y nuevamente lo beso ahora cargando lo.

- Hey!! Bájame bestia! Tan confiado que no te demandaré ! Suéltame yo puedo solo!!

- Acaso no querías comer? - le dió una nalgada. - así me gusta.

- Ugh! Pendejo! - se sonrojo y solo recargo sus codos al hombro del albino siendo llevado como costal de papas.

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Ser sentado bien acomodado en la silla le pareció algo innecesario pero no podía negar que le parecía algo cursimente que le gustaba.

- Eres más de café o leche?

- Café está bien.

- Eso no se notaba hace un par de horas. -

- I-IDIOTA E-ES PARA QUE ME DESPIERTE! - se sonrojo todo.

- No es necesario el café, si quieres yo puedo hacerlo. ¿Te despierto? - Se dió media vuelta encontrando las esmeraldas que lo fulminaban.

Era tierno verlo en ese estado, sabía que si el menor pudiera caminar ya le hubiera tirado la silla o se hubiera ido.

- ... ¿Por qué tú sonrisa ahora es diferente? -

Aquella pregunta lo sorprendió al albino que se quedó callado unos segundos mientras dejaba caer los dos huevos al sartén.

- No se a que diferencia te refieres, Pero supongo que es por qué estoy contigo. -

Aquella respuesta lo callo definitivamente, enserio que si su antiguo yó lo viera le haría burla por aquella admosfera tan romántica que había que la verdad antes como le molestaba o le aburria esos ambientes.

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- No te salieron mal, con razón vives solo. - tomo un poco de café. -

- Nada me sale mal. - tomo un poco de tosino.

- Mmm. - rodó los ojos y siguió comiendo.

- Inozuke.. -

La mirada esmeralda se alzó, era la primera vez que sentía que le decía su nombre con ese tono.

- Tú no me respondiste sinceramente lo que te pregunté. - miro al menor quien trago duro y intento esquivar su mirada. - ¿En verdad no te gusto? -

Ver cómo el de esmeralda nego hizo que se sintiera aliviado, posiblemente iba a recibir una confesión de amor en ese momento por parte del menor pero fueron interrumpidos lamentablemente.

- LEGAMOS!! - Alzó la voz un albino quien entraba con una gran sonrisa.

- No grites no estamos sordos. - dijo el rubio.