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- No me gusta que no me respondas -comente viendo que Ara se debatia entre responde y no- si tienes algo serio con Javier creeme que me voy a alejar -mentí.

- Yo -suspiro y guardo silencio- no, no tengo nada con Javier -respondió haciéndome sonreir- pero, bueno, no es formal -explicó

- ¿Cómo? -cuestione confundido.

- Si, o sea, estamos en ese proceso de iniciar una relación -explicó.

- ¿En serio? -pregunté, no sabia si sentirme molesto o desilusionado.

- Si, no tendría porque mentirte -respondió.

- Esta bien, espero en verdad que seas feliz -simule una sonrisa- solo quisiera ofrecerte mi amistad -comente.

- No sé si sea lo correcto -confesó.

- ¿Por qué no? Digo, no es como que una amistad sea pasar otro plan -dije, pero claramente era una idea para estar cerca de ella.

- No lo sé -dijo.

- Mira, no te digo que me cuentes todo o viceversa, solo tener un trato normal -comente tratando de convencerla- si llegamos a necesitar algo aquí estamos cerca, y somos lo más cercano. Porque sabes que mi familia no esta aquí y bueno tu familia no sé que tan lejos vivan de aquí -explique.

- Esta bien -accedió- solo un trato cordial y básicamente lo necesario -comentó- bueno, te dejo porque tengo bastantes cosas que hacer -informó y agitó su mano en modo de saludo para entrar a su departamento.

Regrese a mi departamento, siendo sincero me sentía mal por el hecho de que Ara sintiera algo por Javier, pero también seguía existiendo cierta esperanza, porque como ella dijo, aun no tenían nada y eso me daba camino para intentar acercarme sin que se diera cuenta ni ella ni Javier.

Aranxa Navarro

Tenia que contarle a Javi la mentira que tenia frente a Alan, porque tarde o temprano se podía descubrir en alguna platica que ellos tuvieran y no quería que Javi saliera afectado por mis malas decisiones.

- ¿Desde cuando frecuentas a Alan? -preguntó mi mamá.

Sabia que ese tema lo iba a tocar tarde o temprano, a pesar de que suelo ser transparente con muchos temas con ella, en mis relaciones soy muy, pero muy reservada, al grado de que nunca supieron el porque terminé con él y acepté seguir a mi familia a Guadalajara, a pesar de que en la Ciudad de México tenia técnicamente mi vida.

- No es como que lo frecuente -aclaré- hoy me lo encontré abajo y me ayudo a subir las cosas -informé.

- ¿Segura? Porque él se ve que sigue teniendo cierta confianza contigo -comento y asentí- aunque me gustaría que volvieras con él, se le ve que aun te quiere -dijo sonriendo.

- Claro que no -dije tratando de convencerme más a mi que a ella.

***

Me había puesto de acuerdo con Mell para salir a comer, era viernes y por fin había terminado semana en el colegio.
Estaba en el restaurante japones que últimamente frecuentabamos, y como siempre Mell estaba siendo impuntual, estaba por mandarle mensaje para presionarla cuando llego corriendo hacia mi.

- El tráfico cada día es peor en Guadalajara -comento justificándose.

- Y más si sigues creyendo que en diez minutos llegas a todos lados -reproche.

- Sorry bebé -dijo y se sentó frente a mi- ¿qué tal te ha ido en el colegio? -pregunto desviando el tema.

- Bien, esta semana ha sido pesada, hemos tenido que planear un par de eventos -comente- quieren hacer una especie de rally.

- Que feo -dijo riendo- yo pensé que solo hacían bolitas y palitos.

- Bueno fuera, pero es mucho trabajo la verdad -informe- ¿cómo te ha ido a ti? -cuestione.

- Bien, no me quejo, he tenido algunos casos que me han mantenido ocupada en los juzgados -explicó parte de su trabajo como abogada- ¿qué pasó con Alan? ¿Ya se dio por vencido? -cuestionó.

- No sé que pasa por su cabeza, ya no lo he visto, pero me ha mandando mensajes todos los días -informé- deja te enseño -comente entregándole mi teléfono con la conversación.

- Déjame leer -dijo deslizando su dedo por la pantalla- "Buenos días, que tu día sea excelente", "¿Cómo te fue hoy?", "¿Por qué no me respondes?".

- Se pone de intenso cuando lo ignoro -expliqué.

- Hasta responde a tus estados con corazones y todo, veamos que más dice: "Que bonita maeta", "Señorita seria un placer invitarla a salir".

- Ese último comentario fue cuando salimos al boliche -comente- y como a él le gusta, por eso me mando ese mensaje -explique.

- Espera, dejo leo también lo que tú respondes -comentó.

- ¡No! ¡Eso es privado! -dije tratando de quitarle mi teléfono.

- Si vamos a quemar a la gente, quemamos a todos -dijo riendo- "Que también tengas un excelente día", "Que te vaya bien en tu viaje, cuídate y suerte en el partido", "Hoy no te vi sacando a Coco a pasear", "Pato extraña jugar con Coco" -dijo riendo- ahora si que te pasaste, ¿cómo pones de pretexto a Pato? Total dile que tú lo extrañas -comentó aun riendo.

- ¡Claro que no! -dije quitándole mi teléfono.

- Tú sola te estas mintiendo -recriminó- dale una oportunidad al pobre hombre.

- No puedo, porque se supone que tengo una relación o bueno, intento de relación con Javi -explique.

- ¿Sigues con esa mentira? -preguntó y asentí.

- No puedo creer que Javier se haya prestado a esa mentira -reprimió.

- Es que, no sabe -explique- no he tenido oportunidad de hablar con él y pedirle que me ayude.

- ¡Aranxa Navarro! Sabes las consecuencias que puede traer, ¿no? -dijo y asentí- entonces por que sigues con esa mentira, me sorprende de ti -dijo mientras movía su cabeza en desaprobación.

- Prometo que hablaré con Javi -informe.

Después de pasar una tarde un Mell había llegado a mi departamento, saque a pasear a Pato un rato y en el camino me encontré con Fer, quien llevaba a Mochi, estuvimos platicando un poco y después regrese al departamento.
Hoy no había recibido ningún mensaje de Alan y me parecía extraño, pero tampoco quería tener la iniciativa yo, porque no quería confundir las cosas.

Casi a las nueve de la noche estaba terminando de recoger la cocina después de cenar, mi teléfono comenzó a sonar, me acerque a ver quien era y se trataba de Alan, me debati si responder o no, pero terminé por dejar perder la llamada, pero volvió a entrar otra llamada de él, algo debía pasar para tener mucha insistencia.

- Hola -respondí a la llamada.

- Hola, ¿estás ocupada? -preguntó respondiendo.

- ¿Por qué? -cuestione.

- Necesito de tu ayuda -pidió- no se que hacer -se escucho desesperado y me asustó.

- ¿Qué pasó? -pregunte tomando las llaves de mi departamento para salir hacia con él.

- Esperame poquito -comentó y se escuchó bastante ruido y un llanto de bebé.

- ¿Cuál es tu departamento? -pregunte caminando rápido.

- Es el 1322, pero esperame ahorita te marco -pidió y colgó la llamada.










¡Hola! Espero que anden super, aquí les dejo un capitulo nuevo. Espero les guste.

Me ayudaría mucho que dejen sus votaciones y comentarios para saber que les parece la historia.

Gracias y las tqm ❤️

224 Presente, Pasado y Futuro, Alan Mozo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora