Luces y Sombras - Yellowjackets- Lottie Matthews

Cap 12

—Alice, te pido que dejes de bailar con él — no sabía que estaba diciendo, mis labios y mi corazón se unieron sin poder evitarlo.

—Que? Por que?

—Solo no quiero que te acerques más a él y ya

—Acaso el te gusta?

—Por supuesto que no— alce un poco la voz por lo absurdo que sería estar enamorada de ese tipo.

—Entonces por que? Creo que hemos formado una linda amistad además el es muy diver…—

—Porque me gustas tú!...— juro que ya no ponía aguantar más. —No estoy tan segura, pero se que esa canción que cantaste esa noche antes de venir aquí, era para mí y tienes que saber que quiero pertenecer solo a ti y si veo cada parte de ti, cada cosa que haces por mi — el maldito alcohol dejaba mi cobardía a un lado y después de mucho tiempo al fin puede decir algo. La mire con tanto deseo de besar sus labios.

Alice

Me quedé en shock, ella acaba de decir que le gusto?! Por eso se comportaba tan extraño? O acaso estoy muy ebria para imaginarlo?

—Lot… Lottie… Yo… yo… Bueno… tu… En serio te gusto?— estaba tan impactada que mis palabras no conectaban.

—Por supuesto que si, te amo desde la primera vez que te vi, recuerdo que no podía dejar de pensar en ti  todo el día y que tampoco dejaba de verte en las gradas mientras dibujabas pensando en como hablarte — Lottie me confeso tomado mi mano y chispas recorrían cada parte de mi —Por favor, dime que me amas, solo dilo, dime que no me equivoqué al pensar que tu también lo haces — ella no paraba de mirar mis ojos y sus ojos marrones decían la verdad completamente.

—Lottie, te amo… y tu me gustas, quisiera estar contigo cada segundo y quisiera ser tuya, amo cada parte de ti, hasta las más estúpida y quisiera besar tus labios llenos de licor y brillo labial ahora… si es que puedo— no podía parar de sonreír, mis labios soltaban palabras que tenían mucho tiempo guardadas.

Ella tomo mi barbilla y miro mis labios, con su  pulgar acaricio la parte inferior de mi labio con deseo, no pudo esperar más y los dirigió a los suyos, ella me besó tan apasionadamente y con tanta delicadez que sus besos sabían tan bien. Esto era lo que tanto anhelaba con todas mis fuerzas, posar mis labios en los suyos hasta que por fin se coincidió. Ella no paraba de besarme y yo no me contenía, sus labios sabían a licor y a su lápiz labial, enserio amaba ese lápiz labial, lo veía en las comisuras de sus labios y cada vez que lo veía, suponía que su sabor sabía tan bien.

Podía quedarme en su boca toda la noche, podía hacerme adicta al toque de sus manos alrededor de mi cintura. Nuestros labios se separaban por micro segundos intentando recuperar el aliento pero no lo suficiente como para interrumpir el beso. Ignore mis miedos y solo me deje llevar.

—Lottie, te amo — suspire cuando ella separo sus labios de los míos para agarrar alimento.

—También yo— me tomo de mi mejilla y volvieron sus labios a mi bruscamente. Mi ritmo cardíaco aumento en el momento en que sentí su lengua tocar la mía, mis piernas se empezaban a sentir débiles y ella lo noto. Sus manos las coloco  a los costados de mi cintura empujándome a la pared del pasillo, rodee mis brazos en su cuello queriendo más de ella, sus besos bajaron a mi cuello chupando mi piel lastimándome un poco.

Una de sus manos rozaba la tela de mi vestido vagando hasta llegar al final, subió la falda de mi vestido tocando mis muslos suavemente, eso provocaba una sensación de excitación en mi.

Sus dedos comenzaron a acariciar la piel de mi entrepierna, llegando a mi ropa interior rozando con sus dedos suavemente la tela que cubría mi parte íntima, eso me provoco soltar un gemido.

—Estas tan mojada— sus dedos rozaban un poco más rápido y yo apretaba mis labios para no gemir. Ya no había ni una piscina de timidez, tal vez íbamos demasiado rápido y probablemente mi virginidad la iba a perder en ese momento y eso le iba a pertenecer a Lottie Matthews así que no tuve ningún impedimento hacía ella.

Ella se aparto de mi sonriéndome —Lot? — le dije confundida y bacía sin su toque.

—Tendrás que tener paciencia— me alejo de la pared y me arrastro de la mano por los pasillos, volviendo a la música.