21. Más problemas

613 88 32
                                    

Alex y Checo se metieron a la casa para curar los raspones que el piloto de Williams se hizo al momento de caerse.
Checo creía que la pierna de Alex estaría bien en cuestión de minutos, pero todo cambio cuando pudo notar que el dolor cada vez se volvía más insoportable.

El resto de la parrilla ya estaba dentro de la casa disfrutando de su respectivo elote, viendo la televisión y platicando de vez en cuando con los dueños de la casa.

— Entonces ese es malo, ¿verdad?.— preguntó Lance, señalando al personaje de la tv

— Sí, pero porque quería con ella.— señaló a la protagonista.— Pero ella lo cambió por ese.— le explicó la niña de la familia

— Uy no, ya me dio coraje.— negó y dejó de ver la tele

El canadiense se acercó a Checo, quien parecía preocupado. El mexicano solo tapó la pierna de Alex con su sabana de tigre y sonrió nervioso.

— Epale, ¿a donde?.— se interpuso en su camino

— ¿Por qué tan asustado?.— se movía para intentar ir hacia Alex

— No es nada, vete para allá.— trataba de correrlo pero no se iba.— O bueno ve y háblale a Fernando

No queriendo hizo lo que le pidieron, pero no sin antes informarle a el resto de la parrilla.
Los pilotos se levantan enseguida para dos cosas: por comida y por chisme.

— ¿Qué fue?.— se acercó el español.— Madre mía, ¿qué es eso tan horrible?.— se asusto

— Yo también quiero ver.— Nico también se acercó.— Ijh que horror. Mira, ven Kevin.— le hizo una seña a su amigo

— No manches, que espantoso.— se tapó la boca de la impresión

— A ver si muy feo.— Daniel también corrió hacia el grupo de pilotos.— Que aberración, ¿eso por una caída?

— Sí está bien feot-...— Lando fue interrumpido por Alex

— Bueno ya, ¿no?, sigo aquí.— se cruzó de brazos

— ¿Y te duele?.— George le pico el gran bulto que tenía en la tibia

— Ay, ay, ay.— hasta se retorcio del dolor.— Obvio que me duele, babotas

— Pero Checo te dijo que cuidado.— le regañó Max.— Nunca le hacen caso

— Ay, ni digas que tu tampoco.— evidenció Yuki

— Te equivocas Yuki.— Carlos levantó la mano.— Max es un mandilon y obvio que le hace caso

— Pueden dejar de insinuar que Max y yo somos algo.— detuvo la pelea.— Ahorita debemos resolver esto.— señaló la pierna de Alex

— Quiere que dejemos de hablar porque sabe que estamos a nada de descubrir su sucio secretillo.— Yuki le susurro a Zhou, quien estaba a un lado

— Siguele Yukino

— Nunca lo has negado, elijo creer.— se fue a sentar a la sala

La parrilla le dio espacio a Alex, para que reposará un poco, en lo que la pastilla le hacía efecto.
Mientras se pusieron a pensar que hacer para que no se hiciera un problema mayor.

— Oye James, descompusimos a tu piloto.— Max sonreía amable.— Mmh no así no. Aquí esta tu piloto, no aguanta nada.— hizo un gesto de molestia.— No tampoco así

— Se puede saber, ¿qué haces?.— preguntó Carlos, se comenzaba a preocupar

— Práctico como decirle a James que Alex tiene la pierna rota

Conviviendo los 20 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora