|Tres días después|-|Viernes|-|Preparatoria de Zoe|-|12:16pm|-|Patio tracero|
—¡Epa! Pero mira a quién tenemos aquí, al Rey de las ausencias. —habla el chico de cabello rosa, colocando las manos en la cintura al ver a su amigo.
—Ya era hora de que aparecieras por aquí. —dice el de pelo azul oscuro, dándole un abrazo como saludo.
—Por favor, ya dejen de quejarse y abrácenme, coño. —responde el susodicho, abriendo los brazos para que Hinata le abrace.
—Sabes... —comenta Hinata antes de corresponder el abrazo— me recuerdas demasiado a una persona que odio mucho. —Tanto Jackson como el otro chico ponen cara de confusión, ya que no entienden a qué se refiere— A mi padre ausente, que un día dijo que iba a comprar tabaco y nunca volvió. TÚ —emarca la palabra "tú" mientras lo señala con un dedo— eres de ese tipo de personas. Pobrecilla la que será tu esposa.
—Si no haces algún comentario despectivo sobre tu padre ausente, no eres tú. —replica Jackson, algo irritado.
Mientras tanto, el de pelo rosa y el pelinegro se dan un abrazo desprendido, como si no se hubieran visto en años (en realidad, solo no se habían visto desde el fin de semana).
—Y bueno, ¿me extrañaron? ¿Qué ha pasado de nuevo en esta vieja institución? —pregunta el de cabello negro, observando a ambos con curiosidad.
—Sí, de hecho... —Jackson intenta contarle a su amigo sobre la aparición de una nueva amiga que habían integrado al grupo, pero es interrumpido por la mano de Hinata cubriendo su boca.
—No le digas, iré a buscarla. —dijo y salió corriendo, desapareciendo de la vista de ambos.
—¿Qué cojones? —sonríe el pelinegro, mostrando sus dientes y destacando su atractivo, haciendo que el corazón de cualquier chica lata con fuerza.
—Pero, ¿qué ven mis ojos? —exclama una chica de cabello morado, acercándose con determinación— Una maldita leyenda. —dice al chocar la mano con un saludo super varonil al muchacho pelinegro.
—Pero miren quién se encuentra por estos rumbos... —añade el chico mientras desciende de un muro que separaba el patio trasero del área de deportes— La hermosa y fogosa Lariza. —dice con coquetería, mirando a la chica a los ojos. Luego toma su mano y deposita un beso húmedo en ella.
—¡Ay, Enzo! —exclama la chica, respondiendo con coquetería.
Lariza sonríe mientras observa los ojos verdes de Enzo, que brillan con intensidad. Ambos disfrutan de su reencuentro después de tanto tiempo, pero había alguien más que no compartía esa alegría y que, en ese momento, odiaba haber nacido, o mejor dicho, presenciar esa escena.
Y no, no se trataba de Jackson. A él le daba igual todo; su atención estaba centrada únicamente en su amado Hinata. Como si ambos chicos estuvieran follando delante suyo, el estaba su propio mundo y se olvidaba de lo que sucedía a su alrededor ya que a Jackson no le importaba nada ni nadie, mientras su mirada se perdía en los ojos de Hinata.
Era la acompañante de la hermosa y fogosa Lariza quien estaba en pie de guerra.
Kris.
De lo cabreada que estaba, tenía los puños cerrados, al punto de encajar sus uñas en la palma de su mano de una manera dolorosa.
La chica de cabello rosa observaba la escena con los ojos inyectados de odio y molestia. Pero no era odio hacia Enzo, ¡no! Su furia se dirigía hacia su mejor amiga. En ese momento, no tenía claro si Lariza seguía siendo su amiga. Lo único que sabía con certeza era que iba a vengarse, que haría que Lariza sufriera al punto de desear quitarse la vida.
Sin embargo, Lariza no era culpable de la situación ni de las ideas que pasaban por la mente de su descontrolada amiga. Ella y Enzo eran muy buenos amigos desde la infancia. Tenían tanta confianza entre ellos que a veces parecían un par de hermanos. Pero todo era un juego, porque si encerrabas a ambos en una habitación desnudos, a Enzo ni se le paraba y Lariza ni se mojaba. ¿Por qué? Porque su relación era como la de hermanos.
Y para los que aún no se han dado cuenta de lo que sucede aquí, les explico:
Nuestra pequeña víbora, Kris, está enamorada del guapísimo Enzo, pero él la ignora por completo.
Y te preguntarás, ¿por qué? Kris es una chica muy guapa, con un cuerpo impresionante. Sin embargo, tiene un problema: su reputación no es la mejor, y todos los chicos que han pasado por su vida la llaman con el mismo apodo:
¡LOCA!
Y... tal vez tengan mucha razón. Tal vez a nuestra pequeña víbora le falla algo en su pequeña cabecita para ser así. O tal vez no... ¿quién sabe?
Kris tiene carisma y siempre que se propone que un chico será suyo lo logra. Pero la única excepción hasta el día de hoy ha sido Enzo. Y eso hace que le atraiga aún más y lo desee con más fuerza.
En cambio, nuestro Enzo nunca ha sentido nada por Kris. ¿Por qué? Enzo prefiere chicas peculiares, diferentes al resto.
Y dirás: "Todas las chicas son diferentes, ninguna se parece".
Muy cierto. Pero él busca a esas que, a simple vista, te das cuenta de su rareza.
Y Kris no era una de esas. De hecho, ahora puede que parezca una de esas, pero ese cambio ella lo hizo solo por gustarle a Enzo. Antes, ella era una más del montón, como él mismo decía.
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The Perfect Girl
Fiksi Remaja-Al final solo somos dos jóvenes queriendo tener algo bonito y duradero- |Contenido +18|