Por la noche, el equipaje ya estaba listo para partir por la mañana hacia la finca mariposa, viaje que producía cierto nerviosismo en nuestros personajes dado que la carta de Tomioka era muy escueta, simplemente citándolos allí sin aportar más información.
Se desato una ligera que tormenta que cierto rubio observaba en el exterior con la mirada perdida, hasta que sintió como dejaban de caerle las gotas.
-¿Qué haces aquí te vas a resfriar?- le dijo Nezuko mientras le cubría con el paraguas.
-Disculpa Nezuko, es que las tormentas me ponen un poco nostálgico- sonrió amargamente.
-¿Te recuerda a tu entrenamiento? claro como usas la respiración del rayo.
-En parte si, pero es más por el abuelo sus gritos eran mucho peores que los rayos je je.
-¿Abuelo? creía que era huérfano, no se mucho sobre tu vida, ¿dónde esta ahora?
-Tienes razón, el abuelo es mi maestro, Jigoro Kuwajima el pilar rugiente, un asombroso guerrero, el me salvo de las deudas y... Creyó en mi cuando ni yo mismo era capaz.
-Es increíble, deberíamos ir a visitarlo un día para que vea al gran guerrero que enfrento a Muzan.
-No te creas, soy un desastre solo domine la primera postura, aunque confiaba en mi para llegar a ser un pilar, a veces siento que sus alumnos no dimos la talla.- se tapo la boca de repente apartando la mirada de su acompañante.
-¿Tenías compañeros? te has puesto un poco raro...
-Lo siento, déjalo vamos a dormir.- se levanta pero una pequeña mano le detiene.
-No... siento que algo te preocupa, puedes hablar conmigo, ¿Qué pasa con el abuelo del que nunca hables? y esos compañeros- se le escapan unas lagrimas al rubio- Zenitsu si es difícil cargar con todo tu solo puedes confiar en nosotros, por favor.- le da un abrazo que tímidamente correspondió.
-Yo... yo solo...- empieza a llorar- si hubiera sido más fuerte yo, yo... podría haberlos salvado- una lluvia de lagrimas empezó a caer.
La chica simplemente le acomodo la cabeza sin soltarle -vamos échalo todo, esta bien llorar-.
Zenitsu se limpio las lagrimas miró a su compañera y finalmente se abrió -no estaba yo solo con el abuelo, había alguien más, Kaigaku. Era mucho más talentoso que yo y se que me odiaba, el domino las posturas de la dos a la cinco, pero sin la primera no podía exprimir todo su potencial por lo que los dos estábamos frustrados. El abuelo sugirió que los dos juntos fuéramos el pilar del rayo pero nunca aceptaría compartir puesto con una basura como yo, por lo que nos abandono.
-Zenitsu sabes que eres un gran espadachín da igual lo que pensará ese imbécil, incluso derrotaste solo a una luna superior- el chico apretó los puños y desvió la mirada- ahora que lo pienso, nunca hablas sobre ello, venciste a un monstruo tu solo pero no sabemos más detalles, solo se que Tanjiro se enteró por un cuervo y que te encontraron bastante malherido.
-Es porque esa luna superior era... Kaigaku- dijo fríamente aun sin mirar a la joven.
-¿Cómo?
-Estaba tan hambriento de poder que acepto la propuesta de ser un demonio, lo descubrí gracias a una carta del abuelo, pero eso no es todo ante la deshonra de que el abuelo entrenara a un traidor tuvo que cometer seppuku- la ojirosa se cubrió la boca ante esa afirmación- no pude estar con él, murió solo sufriendo... ¡no pude hacer nada! si hubiera sido un sucesor digno, si al menos hubiera entendido a Kaigaku- una lluvia de lagrimas volvió a brotar.
-No digas eso... le plantaste cara a ese maldito vengaste a tu abuelo el esta orgulloso de ti.
-Cuesta creerlo perro de cierta manera veía a un hermano en Kaigaku aunque... el no sentía lo mismo. Me enfrente a mi miedo y le busque en la fortaleza infinita incluso le mostré algo que me pase años practicando para impresionarle a él y al abuelo la séptima postura.
Nezuko giro su cabeza hacia el -ves como debes estar orgulloso tu abuelo desde el mas allá puede ver como te volviste un poderoso rayo capaz de proteger a sus amigos.
-Puede que tengas razón- se volvió a secar las lagrimas -gracias Nezuko, vámonos hace frío.
Sin decir nada la chica le abrazo, ambos se sonrojaron y sin decir nada volvieron a su hogar.
Por la mañana los cuatro amigos partieron, durante el viaje discutieron sobre que seria tan importante para que les citara el antiguo pilar. Al llegar a la finca les recibieron todas las chicas, todas menos Kanao.
-Aoi ¿dónde esta Kanao?- pregunto el pelirrojo.
-Ahora tiene una misión importante, pero da igual por ahora entrad hasta que llegue el señor Tomioka.
Dentro se encontraron con más amigos como el maestro Urokodaki, Uzui y sus esposas, hasta Murata estaba allí. Al parecer nadie sabia porque los había citado Tomioka, excepto Uzui pero sus esposas lo noquearon por algún motivo. Pasaron las horas hablando poniéndose al día y jugando. Finalmente al atardecer llego el anfitrión cargaba con muchas compras, saludo a todo el mundo de forma más alegre de como solía incluso abrazando a los hermanos Kamado, tras un rato le pidió a Tanjiro que le acompañe a una sala, llamo y una voz conocida le dijo "adelante" era Kanao.
Allí se encontraba visiblemente cansada la joven pelinegra junto a una hermosa mujer, con un avanzado embarazo. El antiguo pilar se acerco a ella le dió un beso en la mejilla y le agarro la mano con la única mano que conservaba. Miro a Tanjiro a los ojos y finalmente hablo.
-Tanjiro, ¿querrías cuidar de mi hijo?
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Solo escucha tu corazón (tanjikana)
RomanceTras la derrota de Muzan, los cazadores deben seguir con sus vidas, que les deparará en el futuro... Historia del universo de Kimetsu no Yaiba creación de Koyoharu Gotouge.