FINAL DE LA HISTORIA EN WATTPAD PARTE 3

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NARRADOR: A partir de aquí, llegaron los capítulos que el autor pudo escribir en su momento. Decidí no reescribir, solo corregir un poco la ortografía, pues sigue siendo un vestigio de mi redacción en ese tiempo.

A partir de aquí, se narran los sucesos y hechos que seguían en la historia, profundizando un poco en los detalles.

Los sucesos de este incidente ocurrieron una semana antes de que comenzaran los exámenes parciales del bimestre. En medio de su último año, los chicos pasaban por el peor momento que habían enfrentado hasta entonces. La mentira de los muchachos no se podría sostener por mucho tiempo; era cuestión de tiempo para que los padres de Aristóteles fueran a buscarlos. Aris llevaba unos días fuera sin comunicación. La escuela se percató de esta situación por medio de algunos alumnos chismosos que difundieron el rumor por todos lados. Llamaron de urgencia a los padres de Aristóteles. Esto formaba parte del temor y los delirios de Aris, quien no se sentía listo para enfrentar la vergüenza que ahora suponía para su familia.

Tras ser citados a la escuela, las llamadas reventaron los celulares de Luther, Johan, y Demian. Johan apagó el teléfono y Demian directamente andaba desaparecido. Luther era el único con el teléfono timbrando. No quería que vinieran, así que tomó el teléfono y contestó. Sus padres le gritaban como nunca los había oído Luther; le exigían saber el paradero de su hijo. Luther trató de inventar historias falsas, pero no contó con que ya sabían todo. Adelantándose a los hechos y a las posibles mentiras de Luther, los padres de Aris iban en camino. Esto lo percibió Johan, quien afirmaba la dureza con la que los padres irían a buscarlos. No quedaba mucho por hacer, y tampoco podían ocultarlo para siempre. En algún momento, Aris debería darle la cara a sus padres.

En la habitación de Luther yacía Aristóteles, acompañado de la madre de Luther, quien le brindaba su apoyo y afirmaba su intervención cuando debiera hablar con sus padres. Le daba a entender que la vida es complicada para los adultos, pero no debería pagar las consecuencias. Entendía por qué tenía miedo, pero aún guardaba la esperanza de que sus padres lo comprendieran y apoyaran para superar esta situación. Johan y Luther entraron a la habitación, indicando que si aún no se sentía listo, podían llevarlo a casa de Johan antes de que ellos llegaran. Aris, sollozando y ansioso, les pidió que por favor lo ayudarán a conseguir más tiempo, ya que aún no se sentía listo para dar la cara.

¿Quién es Aristóteles más allá de sus diarios?

El señor Chen, el mayor de cinco hermanos, provenía de una familia asiática que se mudó a Latinoamérica. Estaba bajo la presión de ser el ejemplo de la familia, un hombre brillante con un gran futuro, que esperaba ser un modelo para sus hermanos y brillar por el legado familiar. Su objetivo era obtener un gran empleo, casarse con una bella dama tradicional, tener una casa y criar a un buen hijo. Quería que su hijo cumpliera con lo que alguna vez fue él: un hombre valiente, atlético, inteligente, sociable, que seguiría su mismo patrón. Esperaba que su hijo se convirtiera en un hombre de gran salario, capaz de comprar una casa y formar una familia con una bella dama. Pero su vida nunca fue como la había deseado.

Aunque más jóvenes, sus hermanos emprendieron negocios que rápidamente generaron grandes ingresos. Chen cumplió con tener una bella dama, pero fue despedido debido a un recorte de presupuesto. Sin embargo, tras negarse a tomar trabajos mal vistos que no fuesen de oficina, sus ingresos empezaron a disminuir. Comenzó a mentir repetidamente, viviendo en una casa que aún estaba pagando, dedicando la mayor parte de su salario a mantener las apariencias y cuidar la imagen. Seguía esperanzado en aquel lindo niño que nacería. Aristóteles, bello e inteligente, era ansiosamente esperado por su padre.

Conforme Aristóteles iba creciendo, su padre se dio cuenta de que no sería lo que él deseaba: para nada bueno en los deportes, retraído y de carácter débil, pequeño y, para su padre, poco atractivo. El peso de salir adelante formaría parte de su imagen. Al menos Aristóteles era listo, pensaba su padre, quien siempre le recriminaba por todas estas características que él nunca tuvo. Intimidaba a Aristóteles para que siempre guardara las apariencias, siendo sus notas la única opción para no decepcionar a la familia, y el único motivo por el cual aceptó a sus amigos, que provenían de buenas familias y que hacían lucir mejor a su hijo.

Creo Que Soy Gay (Publicándose)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora