chapter XXIV - ☕︎

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mi licencia por luto había acabado, debía volver al trabajo, y no sé que haría con Bora, no sé si el dinero me sería suficiente para pagar una niñera todos los días, ni siquiera minji iba a poder cuidarla si debía ir a la universidad.

pero no tenía opción, me fijé en los avisos del diario si había a alguien que se ofreciera, hable con minji al respecto y me dijo que le preguntaría a alguna de sus amigas, mientras tanto hablé con jefe al respecto y me dijo que no tendría problema en que lleve a la bebé pero que no quería que hubiera ningún problema.

un gran problema sería para mí, bora esta muy rebelde últimamente, es una etapa común en los híbridos, dónde van descubriendo su poder interior y no lo saben manejar, el cual afecta sus emociones tambien.

un nuevo día se presentó a través de mi ventana, me levanté y me puse mi uniforme el cuál, era el del mc'donalds, si que peor trabajo que un mc'donalds con una niña de apenas 5 meses.

lo que sea, fui a preparar mis cosas mientras preparaba las cosas de la bebé, tomaría el desayuno en el trabajo, por suerte, el turno de la mañana siempre es poco concurrido y quizás puedo estar tranquila con la bebé.

preparé su bolsito, la vestí con una tierna camiseta de hello kitty y un pantaloncito rosa, junto con unas medias que hacian juego y le trate de peinar los dos pelos locos que tenía haciendole dos colitas. se veía tan tierna que no me negué a sonreír y tomarle un par de fotos.

la cargué a ella y a su bolso y me dirigí al auto, para así subir y conducirme a mi trabajo, no sin antes acomodar a la bebé en su sillita.
al llegar todos mis compañeros me saludaron estando contestos porque haya vuelto, más que se pusieron a jugar un poco con la bebé mientras tomaba un poco de café.

me puse el porta bebés en la espalda y la cargué allí para poder hacer mi trabajo, por obra de Dios hoy me tocaba estar en la caja, algo no tan complicado como preparar las hanburguesas.

flashback
un día común y corriente era otro día de trabajo, faltaba 1 hora para cerrar y no llegaba nadie, me aburría. pero claro, quien compraría hamburguesas un lunes a las 10 de la noche? quizás alguien que no tenga que hacer al otro día, no lo sé y no me importaba

de pronto, salí de mis pensamientos cuando escuché el ruido de la puerta, una chica de no muy alta estatura, pero bastante hermosa y con un cabello marrón oscuro que irradiaba un hermoso brillo se acercaba a mi, me quedé embobaisima.

-mmm... que pediré?... -dijo con una voz dulce mirando la cartelera de precios.

-avisame cuando estes decidida -no podía dejar de mirarla, era muy hermosa.

-mmm...dame una cajita feliz, por favor -dijo aquel hermosa chica con unos iguales de hermosos ojos oscuros mirandome atentamente.

-una cajita feliz? tu hermano estará contento -reí marcando en la pantalla para darle su recibo.

-eh...no tengo hermanos, es para mí -dijo y se quedó calllada, pero de repente se rió, una risa bastante energética y graciosa que me contagió a mi tambien.

-qué adulto se compra una cajita feliz a las 10 de la noche? no se ve todos los días eso -reí mientras decidía preparsela yo misma.

-sí, solo yo kim bora -dijo con cierto orgullo siguiendo su mirada a lo que hacía.

-kim bora...y yo lee siyeon, te lo estoy preparando -reí tambien poniendo todo en la bandeja para dárselo.

sí, con bora nos conocimos en mi tabajo, pidiendo una cajita feliz un lunes a las 10 de la noche. nunca olvidaré ese lunes, a esa chica de baja estatura, cabello y ojos oscuros que conocí ese día, que se convertiría en el amor de mi vida y la que me convertiría a mi en madre. todos los días la extraño y ese lugar me llena de nostalgia.

fin del flashback

en algún momento, sentí libre mi espalda, como si un peso se hubiera ido, miré para mi alrededor y no estaba, toqué mi espalda y tampoco, abandoné mi puesto al instante, comenzando a recorrer todo el lugar hasta hallar a la bebé, no había rastro de ella.

al último lugar que se me ocurrió fue al área de juegos, la de niños pequeños, fui allí y estaba junto con otros pequeños y con mi compañera Nayeon la cuál se hacía cargo de esa zona, solté un largo suspiro de alivio al verla, me acerqué y acaricie su cabello.

- ey, otra vez no que le das un infarto a tu mamá -dije y ella solo se reía mientras la cargué en mis brazos y la llene de besos.

- puedo cuidarla mientras tu sigues en tu puesto, el jefe te matará si ves que lo abandonaste -dijo Nayeon sin dejar de ayudar a un niño a pintar.

- bueno... confío en tí -sonreí levemente, dejé a la bebé junto a ella y me fuí rápidamente a mi puesto.

por suerte el jefe no me vió, y no había ingresado nadie al local, hasta que sentí la puerta abrirse.

espera, esa es minji?...pero que hace de la mano con otra chica...

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⏰ Última actualización: Aug 12 ⏰

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los cuidados de una omega ; siyeonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora