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MinHo todavía no puede entender que realmente, sus hermanos, organizaron una fiesta sorpresa para él con sus primos, su novio y la familia de su novio. Se supone y según JiSung, ellos dos saldrían a desayunar ese día después de su primera clase, luego tendrían una necesitada sesión de besos en su casa y ya por la noche, saldrían a cenar con sus hermanos. Jamás se imaginó qué le estuviesen organizando una fiesta.

MinHo esta muy feliz por primera desde la muerte de su madre, pues tiene a su familia y a JiSung a su lado, demostrandole cuanto lo quieren. Quizás debería darle las gracias a Felix, porque fue él a quién se le ocurrió, pero eso, claramente, no sería muy Lee MinHo de su parte. Así que nada más le da un abrazo y un beso en el cabello antes de volver a la terraza de su hogar, donde JiSung se encuentra con sus primos jugando serpientes y escaleras.

-¡Jaemin, no seas tramposo!

-¡Oh, pero si mira, el tramposo número uno a hablado! Cállate, Lee Jeno.

MinHo mira fijamente a su novio. JiSung es muy lindo, pero desde que empezaron a tener intimidad, se ha vuelto más provocativo, si antes le daba vergüenza un pequeño beso en los labios, ahora era el mismo quién jalaba a MinHo para besarlo. Y que decir de su forma de vestir. JiSung siempre fue tierno, su ropa era de colores suaves, levemente ajustada, siempre traía sus lentes grandes y se la pasaba rojito de las mejillas, ahora, suele usar ropa ajustada qué deja a vista esa pequeña y fina cintura qué Lee MinHo ama. Los pantalones siempre hacen qué los demás lo miren porque resalta ese grande y redondo trasero, que nadie había visto antes porque el menor jamás lo permitió.

JiSung sigue siendo JiSung para los demás, pero para Lee MinHo, JiSung es mil veces más hermoso ahora que no se esconde, es mil veces más perfecto ahora que deja ver toda su belleza. Lo ama, no va a mentir nunca más, esta enamorado de Han JiSung como nunca se enamoró de nadie. Y sabe que tiene que hablar con sus amigos para deshacerse de esas estúpida apuestas ahora que todavía puede. Además, debe hablar con JiSung para explicarle que, al principio, todo empezó de manera tonta, pero que ahora, que ya tienen un mes saliendo como novios, esta más que feliz de tenerlo a su lado. Y que lo ama.

-Honnie, ¿quieres jugar con nosotros? - le pregunta JiSung sonriendo. Es la primera vez que su novio le llama de esa forma, frente a sus primos, lo cual ocasiona las burlas inmediatas de todos.

-Si, Honnie, ¿quieres jugar con nosotros? - le pregunta Park JiSung burlándose de su primo menor mientras hace un puchero.

-Vamos, Honnie, un juego y ya... - le sigue Jeno también haciendo puchero.

-A ustedes dos no les queda decirme así, se ven sumamente homosexuales, así que cállense. - les responde parándose detrás de JiSung. El menor se ríe, pero hecha la cabeza hacía atrás solo para que MinHo le de un beso. - ahora vuelvo, necesito hablar con Chris y ChangBin.

-Esta bien, pero no te tardes. - le responde sonriendo. MinHo le da otro beso antes de alejarse para ir con sus amigos qué se encuentran sentados junto a SeungMin, debajo de unas sombrillas de playa. Los tres están platicando entre risas, probablemente recordando su niñez y las travesuras qué hacían junto a la mamá de los Lee.

MinHo toma toda la valentía qué tiene desde hace unos años, solo para poder hablar con esos dos.

-SeungMin. - el mayor lo voltea a ver aun sonriendo. - ¿Puedes dejarnos solos? - le pregunta.

-Supongo que sí. - responde el mayor de lentes de sol. Ya es algo muy normal ver al segundo hermano Lee con esos lentes y es que cualquier tipo de luz le molesta con esas resacas de todos los días. No importa si es de día o de noche, SeungMin siempre está ebrio. - luego seguimos hablando de eso, porque te juro que no recuerdo haber echo eso, ChangBin.

Enamorando al nerdDonde viven las historias. Descúbrelo ahora