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Nunca lo ha hecho antes, el tocarse. JiSung siempre ha vivido con una vida tranquila dentro de lo que cabe. Si quitamos el hecho de que sus compañeros lo molestan día y noche, JiSung no vive mal. Tiene una familia que lo ama y que el ama mucho más.

Pero desde que Lee MinHo confesó gustar de él, JiSung ha estado teniendo muchas necesidades nuevas que nuca jamás tuvo antes. Nunca necesito que alguien lo besara todo el tiempo, ni tampoco necesito que alguien lo tocará o que lo mirará fijamente. Nada de eso fue necesario antes, pero Lee MinHo esta conquistandolo, esta enamorandolo mucho y muy rápido. Tan rápido que JiSung siente mucha necesidad de ser tocado por él todo el tiempo.

Y lo que paso en casa de los Lee, unas horas atrás, realmente fue fascinante, algo muy nuevo que le despertó muchas sensación que él jamás ha sentido antes y aunque no es la primera vez que Lee MinHo lo toca de esa forma, JiSung sintió mucho más especial y más íntimo ese momento. Todavía puede sentir los labios de MinHo sobre los suyos, la fuerza qué estaba ejerciendo en su cuerpo para tenerlo más cerca, incluso, todavía puede sentir como su mano esta en su intimidad robándole mil y un sonidos.

Todo es tan nuevo para él qué apenas sale del baño, aún desnudo, se acomoda en su cama. No hay nadie en casa, su papá salio con sus amigos y su hermana tiene otra cita con su novio en alguna parte de la ciudad, así que JiSung puede tocarse todo lo que deseé sin qué ellos lo sepan o más bien, sin qué el tengo que ser silencioso para que no lo descubran.

-Bien... esto es normal, Sung. - se dice y con las manos temblandole, desata las correas de la bata blanca sobre su cuerpo, abre esta misma y admita su cuerpo desnudo por primera vez en sus 18 años de vida. No hay ni una sola marca en su pecho, ni en sus piernas. Nada que le haga recordar feos momentos. Entonces desliza su mano por sus hombros, acariciandose suavemente, pensando que es MinHo quién lo hace.

Cierra sus ojos suavemente y se recarga en las almohadas de su cama mientras continúa tocando cada parte de su cuerpo hasta llegar a sus piernas. Suspira abriendo los ojos mientras se muerde los labios con fuerza. Va a hacerlo, va a tocarse pensando en Lee MinHo.

-¡JiSung, ¿Estás en casa?! - el grito de su hermana mayor lo hace detenerse de inmediato. Asustado, se pone ropa interior y amarra los cordones de su bata. Tiene el corazón acelerado por todo y siente que le va a dar un infarto si no se calma, además, le arde la cara, el cuello y las orejas. - Sung, ¿sigues despierto, dulcesito?

-Si, Miyeon, pasa. - le responde después de ordena un poco la cama y finge salir recién del baño. - me estaba dando un baño.

-Oh, creí que llegarías más tarde y que por eso papá no iría por ti. - le dice ella sonriendo. JiSung sabe que se ve asustado y nervioso pues apena llega a donde su hermana y tira la foto que se encuentra sobre la mesa de la lámpara. - ¿Qué tienes? Te ves asustado.

-Es que casi me caigo en la regadera y luego, Bbama estaba ladrando así de la nada. - responde mientras recoge el marco y los vidrios. - mañana llegan los chicos, quiero dormir temprano.

-Bueno, y ¿quién te trajo? - le pregunta ella todavía más que emocionada. JiSung suspira y deja todo sobre la mesa. Ya mañana podrá limpiar todo con más calma, porque ahora, justamente ahora, le tiemblan las manos.

-MinHo me trajo... esta queriendo ser un buen pretendiente y esas cosas... ¿a ti como te fue?

-Oh no, no vamos a hablar de mí. Hoy hablaremos de ti... - dice ella sonriendo todavía.

-¿Qué quieres hablar? No esta pasando nada fuera de lo usual.

-Las cámaras de la casa no dicen eso, Sung.

Enamorando al nerdDonde viven las historias. Descúbrelo ahora