Querida hermana,
Ayer me quede dormida escribiéndote.
Resulto que los chicos me miraban así porque les parecí muy buena, lo que no entendí, ni nunca entenderé. Me dijeron que dentro de poco había un concurso y que debería apuntarme. Y en ese momento apareció alguien a lo lejos corriendo hacia nosotros
Yell
Me levante mientras todos le miraban y me fui sin decir nada, escuche sus gritos a lo lejos, pero no me giré.
--
Esta mañana recibí un mensaje.
9:00 a.m. del día 10 de junio, nuevo mensaje:
Yell:
¿Por qué te fuiste tan rápido ayer? Yo también quiero ver como patinas.
Yo a Yell:
Déjame ¿sí?
Yell:
Bueno, esta bien.
Me pareció extraño que dijera eso, pero lo deje pasar, ya tenía bastante problemas, cosas en la cabeza y demás como para que un niñato me comiera más la cabeza.