Capítulo cinco: Miradas Cruzadas.
Uniforme, listo. Mochila, lista. Desayuno, listo. ¿Hange?
¡Maldita sea, Hange! Casi la olvido. ¿Dónde se ha metido? Fui a la habitación de Zeke, donde normalmente la encuentro.
Al abrir la puerta, me encontré con una escena perturbadora y desagradable. Pensé que mi mente no podría ser más impura, pero aquí estaba.
—¡Por Dios! —gritó Hange, cubriéndose con una sábana.
—¿Por qué no has tocado la puerta? —me miró Zeke, frunciendo el entrecejo.
—Yo... Ya es tarde —dije, dispuesta a salir cuando Hange gritó.
—¡Si quieres, puedes unirte a nosotros! —gritó Hange.
Salí lo más rápido posible de allí y me dirigí a la cocina, donde me lavé los ojos, tratando de borrar la imagen de mi mente.
—¿Todo bien? —preguntó Eren al entrar en la cocina.
—Sí, todo bien —afirmé, limpiándome los ojos.
—Te ves disgustada —dijo él—. ¿Acaso viste a Zeke follando con Hange? —dijo en tono burlón. Al ver mi expresión, empezó a reír como un idiota.
—Cierra la boca —le dije, pasando a su lado—. Dile a Hange que me fui, y que si me pierdo, fue su culpa por olvidar que tenemos clase hoy.
—¿Hoy es el primer día de clases? —preguntó preocupado. Asentí—. Mierda, se me ha olvidado.
Salió corriendo escaleras arriba, supongo que para ponerse el uniforme. Olvidé que Eren también iba a la universidad. A veces me siento mal por no ayudarle.
Zeke terminó la universidad hace un año. No sé qué estudió, pero me dijo que fue hace un año.
Me senté en el sofá, resignada, esperando a Eren y a Hange. Miré el reloj: 7:00 a. m. Creo que me levanté demasiado temprano.
—¡Estoy lista! —gritó Hange, lanzándose a mis brazos y aplastándome.
—¡Ay! —me quejé, ¿Qué tanto come esta mujer?— Quítate, me vas a romper los huesos.
—¡Oye! —se levantó indignada—. ¡Ni que estuviera tan gorda!
—Lamento ser yo quien te diga que sí —dije, fingiendo desagrado.
—Me has roto el corazón —dijo, fingiendo sollozos y con voz quebrada—. Ni Zeke fue tan duro conmigo la primera vez que lo hicimos.
Hice una mueca de asco al recordar lo ocurrido antes.
—Eres una mujer desagradable —dijo Eren, pasando un brazo por los hombros de Hange—. Me agradas.
Observé cómo Hange le susurraba algo al oído a Eren, y él se apartó como si ella quemara.
—Este... Bueno, vámonos antes de que Zeke venga —dijo, nervioso.
Hange rió—. Sí, vámonos antes de que te mate.
Vi a Zeke bajar las escaleras con una expresión dolorida, lanzando a Eren una mirada de "estás muerto". Eren solo cruzó miradas con él y salió corriendo de la casa.
—¿Y este qué le pasa? —pregunté al ver a Eren caerse en la entrada y gritar "estoy bien".— Eso fue raro.
—Cosas de hermanos —dijo Zeke, abrazando a Hange por la cintura y depositando un beso en su sien.
—Yo también soy su hermana —dije, cruzándome de brazos.
—Tú lo has dicho, hermana —dijo Zeke, enfatizando la palabra "hermana".
ESTÁS LEYENDO
He Is Dangerous. (Rivamika) REMAKE y FINALIZACIÓN.
Fanfic-¿Quién es él? -pregunté, sintiendo un nudo de curiosidad en el pecho. -Mira, mi linda azabache de tez blanca -respondió el chico rubio, inclinándose hacia mí con un susurro-. Solo tengo una cosa por decirte: él es peligroso. Mis ojos se desviaron h...