Clase 6

48 14 0
                                    

La ansiedad lo estaba carcomiendo y con los nervios a flor de piel, no era un buen pronóstico. Llevó una mano a sus labios frente al espejo de su tocador, dibujando una pequeña sonrisa, al recordar como estuvo a punto de besarse con Taehyung, de no ser por la interrupción de su hermano del alma.

—Creo que lo perdimos—musitó bajito Jisung, solo para que le borgoña le escuchara, quien afirmó de acuerdo.

—Definitivamente.

— ¿Saben que puedo oírlos? —se volteó a verlos con diversión.

—Ese es el punto—agregó Yoongi.

— ¿Seguro que quieres que vayamos contigo? Solo seremos mal tercio—recostó el peso de su espalda en sus antebrazos, que estaban apoyados encima de la cama.

—Lo mejor es que estén ustedes solos.

—Me gustaría, pero le prometí a Kook que ustedes me harían compañía, se rehúsa a dejar que me quede solo con Tae.

—Y lo entiendo completamente, pero ya es hora de que Jungkook te suelte las riendas, han pasado dos años, no puede pretender que nunca conozcas a alguien más o tengas pareja—rodó los ojos Jisung.

— ¿Me perdí de algo? —preguntó Yoongi confundido, a lo que Hoseok y Jisung se miraron alarmados.

—Lo siento, hablé de más—agachó la cabeza el castaño.

—Descuida—lo tranquilizó Hoseok—. Es un tema delicado, Yoon. Pero te lo contaré algún día, lo prometo.

—Bien—se resignó Yoongi—. Cambiando de tema, ¿a qué hora es tu cita?

—No es una cita—sus orejas se colorearon levemente—. Solo va a darme una tutoría.

—Ajá.

Una vez el azabache había terminado de arreglarse, los tres amigos bajaron al living, donde se encontraba Jungkook sentado en el sofá revisando algunos casos del bufete, mientras cargaba unos lentes con aumento.

—Ya nos vamos, Kook.

Jungkook al verlo se levantó, acercándose a su hermano mientras se quitaba los anteojos.

—Cuídate mucho, Hobi. Chicos—se dirigió al par—, Les encargo a mi hermano, mantengan vigilado al tal Taehyung—ambos chicos asintieron y Yoongi volteó sus ojos ante lo sobreprotector que era Jungkook.

—Lo haremos—le dio un beso en la mejilla a su hermano, para por fin abandonar la casa con sus amigos.

El mayor dejó escapar el aire en un suspiro, mientras volvía a tomar lugar en el sofá, marcando un número en especial.

—Hola, bebé—habló cuando le contestaron en la otra línea—. ¿Estas ocupado? Tengo la casa sola hoy.

Al llegar al lugar, los tres chicos se adentraron al mismo edificio donde recibían el curso de defensa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al llegar al lugar, los tres chicos se adentraron al mismo edificio donde recibían el curso de defensa. Hoseok jugaba nervioso con sus dedos mientras esperaba que el elevador los dejara en el quinto piso. Cuando así fue, los tres salieron de este con dirección al estudio de Jimin.

Defensa Personal - VhopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora