Capítulo 6

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Se despidieron de Mara en la entrada del camino, todos le dieron un beso y un abrazo, incluso Harry, como notó Deuce, y cada uno cargó con su mochila. Deuce examinó su palo para caminar, un largo trozo de madera oscuro moldeado a mano. Tenía una cuerda atada en un extremo para servir de agarre, y fija en la madera en la parte superior había una brújula.

—Esa vara es impresionante —dijo Harry, deteniéndose a su lado mientras se abrochaba el abrigo. Llevaba la vieja mochila de Deuce colgando de sus amplios hombros.

—Lo es —coincidió Deuce—. Louis lo hizo para mí. Vio uno en un programa de tiros en algún sitio y creyó que sería útil.

Harry se rio.

—Muy considerado de su parte —dijo más sinceramente.

—Puede serlo cuando quiere —contestó Deuce mientras ajustaba el tirante de su bolsa.

Harry sonrió levemente.

—A veces —concedió, mirando a su compañero, que estaba dando la vuelta a uno de los coches que había en el aparcamiento, con expresión concentrada—. Bueno... —suspiró Harry mientras observaba a Louis por un momento—. ¿Adónde vamos? ¿Vamos subiendo por la montaña en cualquier dirección? —Miró a los árboles, y ahora que Deuce le prestaba atención, podía ver que Harry estaba tenso. Incluso puede que nervioso.

—Hay diferentes senderos que podemos seguir desde aquí —contestó Deuce. Tiró de uno de los tirantes de la mochila de Harry para ajustarlo, asegurándose de que estuviera bien. Tomar prestada una mochila para ir de acampada estaba mal visto porque era muy importante que se ajustaran bien. Pero Harry y Deuce eran más o menos de la misma altura, y la bolsa no estaba demasiado llena, así que Deuce no estaba preocupado por ello—. Normalmente no tenemos planeada una ruta. Solo una idea general de lo que tardaremos para que mamá pueda recogernos al final. Louis lleva el mapa.

Harry miró furioso a Louis mientras Deuce hablaba, y su hermano simplemente sonrió malévolamente mientras les adelantaba. Era fácil para Deuce ver la rutina entre ellos. Louis y Harry se llevaban mejor cuando se metían el uno con el otro. Disfrutaban del enfrentamiento, y Deuce estaba disfrutando viendo todas las partes del puzle que era su relación y cómo estaban empezando a encajar.

—Genial. Escogerá la más difícil —refunfuñó Harry mientras Louis les adelantaba.

—No —respondió Deuce con seguridad—. Nunca escoge ninguna de las realmente malas cuando voy con él —dijo con un golpe de su bastón en el suelo indicando su pierna mala.

Harry le mostró una sonrisa de disculpa, pero Deuce le restó importancia.

—¿Están listos? —les preguntó Louis desde el principio del sendero.

—¿Qué pasa con el coche? —preguntó Harry mientras él y Deuce se reunían con él.

Louis se encogió de hombros y lo miró de nuevo.

—Tiene la ficha de inspección caducada —explicó—. Lleva aquí parado un tiempo.

Deuce miró de reojo al vehículo desconocido, preguntándose cómo era que Louis se había dado cuenta y por qué Harry había sentido la necesidad de preguntarle. Debía ser una cosa del FBI.

—¿Quieres que hagamos algo? —le preguntó Harry a Louis mientras miraban al viejo coche. Había diversas pegatinas del sendero Apalache y del Valle Shenandoah, entre otras, en la parte de atrás. El dueño era obviamente un senderista.

—Diez a uno a que el conductor lleva una cartera de cáñamo —le dijo Deuce a Louis con ironía.

Louis resopló y movió la cabeza, sonriendo. Dirigió una última mirada al coche y se encogió de hombros. Deuce supuso que el coche probablemente pertenecía a un senderista experto que se había olvidado de pasar la inspección. Louis aparentemente pensaba lo mismo.

Sticks and Stones (may break my bones)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora