-Muña Kepa

114 10 0
                                    





Aemma Targaryen


El agua humeante hacía que todos mis malos pensamientos desaparecieran, tenía una suave tela sobre mi cuerpo.

- ¿Amor, quieres burbujas o jabón de calabaza?- La voz de mamá sonó en la parte de enfrente de la habitación.

Reí ligeramente y continué apoyada en el cojín en el suelo.

- Está bien mamá, no importa- Dije deshaciendo mi trenzas.

Mamá llegó llena de esencias.

- ¿Cariño, así está bien el agua?- Mamá tenía su ropa de dormir puesta.

Durante los últimos días papá y ella se habían turnado para estar conmigo, todos mis hermanos se la pasaban en mi habitación, en especial Luke y mi gemelo, no me dejaban sola ni un segundo.

- Si, está perfectísima- Me levanté y sin más sumergí todo mi cuerpo en el agua.

- ¡Está hirviendo!- Mamá me advirtió.

- Demasiado tarde- Dije completamente empapada.

Mamá se acercó rápidamente.

No había palabras suficientes para describir lo mucho que me gustaba el agua caliente.

Los últimos días no habían sido nada fáciles para mí, todo ha sido sombrío, doloroso y sin ningún matiz de color.

Mi doncella Dalia, que era inocente y ajena de todo mal, había muerto por mi culpa.

Ni siquiera era capaz de recordar nada sobre esa noche.

Ni quería hacerlo.

- ¿Amor?- Mamá se hincó a la altura de la tina y acarició mi brazo- ¿Estás bien mi vida?- Mamá me cuestionó.

La vi a los ojos y deslumbre la perfección en ellas, con su piel tan pálida y sus ojos tan llenos de vida, nunca seré ni la mitad de perfecta que ella.

- No..- Dije al fin- Me duele que por mi culpa alguien esté muerto, me duele el hecho que no puede volver el tiempo atrás y salvar a Dalia, sé que todos esperan que sea fuerte pero en estas paredes nada bueno puede salir, soy una persona sensible y si eso significa debilidad entonces lo soy- Pequeñas lágrimas salían de mis ojos.

Mamá se acercó y tomo mi rostro.

- Mi dulce niña... lo que te hicieron no tiene nombre, a tu edad yo no era tan fuerte como tú, ser sensible no te hace débil, al contrario, eres perfecta y nada de esto fue tu culpa mi amor, sabes que tu padre y yo tratamos de protegerte a cada segundo y minuto que pasa, incluyendo a tus hermanos, pero eres una princesa Targaryen y así como el nombre nos da privilegios también es una carga que llevamos sobre nuestras espaldas- Explicó para abrazarme mojándose un poco.

Me permití abrazarla con todas mis fuerzas, amaba a mi mamá no sabría qué hacer sin ella.

- Gracias mamá- Le susurré.

- Soy yo quien debería agradecerte- Susurró de vuelta- Tu padre se volvió loco cuando se enteró y vaya jamás había visto tanta sangre correr... pero eso no es importante- Ambas reímos sutilmente.

- ¿Rhaegal?- Le pregunté.

Lo habían visto volar inquieto según Luke.

- Rugía como loco, y según los maestres tenía dolor- Verdad.

No veía la hora de salir a montarlo, el siempre sentía lo que yo.

Todos hablaban sobre eso en la fortaleza, papá no descanso hasta encontrar al responsable incluso
llegó al pie de mi cama cubierto de sangre, fue bastante traumático considerando que suele hacer eso desde que tengo uso de memoria y me recuerda que nadie puede lastimarme sin pagar el precio.

Nothing to lose [Aemond Targaryen]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora