🫀CAPÍTULO 4 🫀

104 6 0
                                    

Llegamos a la academia y cada uno se dispuso a hacer sus actividades, por mi parte yo seguiría ayudando a Kokona y a Miyu a ofrecer postres en la escuela así que me dirigí al club de cocina.

Kokona: ¡Hey! ¿Cómo sigues?

Saki: Si, mira te hicimos un postre para que puedas sentirte mejor -Me enseñó un pastel con Philadelphia y kisses-

—Wow, gracias chicas, son tan amables y lindas -las abracé-

Kokona: ¿A qué no adivinas quién volvió?

—¿Quién?

Saki: Ven -Me llevó al otro lado de la cocina- Él es nuestro líder ¡Amao Odayaka!

El pelicastaño volteó y me vió con una sonrisa a lo que se la devolví.

Amao: ¡Hola! No sabía que estudiabas aquí

—Ni yo sabía lo mismo de tí

Amao: Me comentaron Saki y Kokona que siempre les ayudas a ofrecer postres, eso es muy dulce de tú parte

—Gracias, pero creo que no me van a necesitar ahora que está su líder

Amao: Siempre es bueno tener a alguien más! ¿Por qué no te unes al club de cocina?

—Me gusta ayudarles pero, la verdad es que cocinar todo el tiempo no es algo que me gustaría o al menos tener el compromiso.

Amao: Entiendo, aún así eres bienvenida cuando gustes

Saki: ¿Ustedes se conocían?

Amao: Fué a mi cafetería el viernes con dos jóvenes, uno rubio y un pelinegro

Kokona: Deben ser Taro y Raibaru, son inseparables los 3

Amao: Me comentaron que estaba triste ese día, espero te hayas mejorado

Saki: Debió ser por lo de Osano

Amao: ¿Él era tú amigo?

Bajé la mirada y suspiré

—Sí, mi amigo de la infancia

Amao me abrazó y después se alejó

Amao: Un abrazo siempre ayuda a los demás a sentirse mejor -Me entregó una caja de galletas- Mi mamá siempre dice que pancita llena es persona feliz

—Gracias Amao eres muy dulce

Amao: Una persona tan linda no debe estar triste

Narra Ayato
Estaba caminando buscando a mi amada para poder consolarla, aunque ¿Cómo podría? Si el tan solo verla hace que me paralice y que actúe extraño, es que es tan perfecta y…

I.C: Hola Ayato, me alegro de que estés alegre por Osano

—Si, ya me habías felicitado.

I.C: Ya uno no puede ser amable

—¿Qué ocupas?

I.C: Bien, te tengo una noticia que a lo mejor es muy agrio su sabor para tí pero dulce para otros.

—¿Por qué hablas como si fueran postres?

I.C: Me alegro que lo intuyas porque de eso va tú siguiente "rival"

—¿Rival?

Escuché el ting del teléfono, era una foto, la abrí rápido la cual no fué mi agrado, esa es mi (T/N) abrazando a alguien más.

Promesa de sangre 🫀 (YANDERE-KUN X TN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora