Two For Three

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Amaba el olor de las flores recién regadas. Amaba el olor a tierra mojada.

Colocó de manera suave su cabello detrás de la oreja, mientras lo veía con nervios en los ojos.

¿Así se sentía el amor?

¿Era esa sensación de mariposas en el estómago, que le hacía actuar tan impulsivo?

Porque, sí era así, realmente no le molestaba.

Giyuu era bastante considerado con él, incluso después de como lo trato durante bastante tiempo.

“¿Puedo?” Pregunto mientras acariciaba la mejilla del mayor, quién estaba sentado enfrente de él.

“Estamos casados, Obanai, ¿qué pregunta es esa?” Giyuu río levemente antes de tirar de la camiseta a su pareja, obsequiandole un beso bastante dulce, pero agradable.

“Es que todavía me da vergüenza“.

Drabbles ObaGiyuu. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora