Un Nuevo Villano? Miraculous Ladybug

Capitulo 9

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Rai estaba en la panadería, atendiendo a los últimos clientes de la tarde. Había aprendido a desenvolverse con naturalidad en el mostrador, preparando los pedidos con eficiencia mientras mantenía una sonrisa que, aunque falsa, había perfeccionado con el tiempo. Con cada cliente, sus movimientos eran mecánicos, casi automáticos, permitiéndole mantener su mente libre para otros pensamientos.

Mientras despachaba a un hombre que llevaba una bolsa llena de croissants, su mirada se desvió hacia la puerta trasera donde Madame Dupont estaba en el almacén, ocupada revisando los ingredientes. Su mente, sin embargo, estaba lejos de la simplicidad de la panadería. Agradeció al cliente y, una vez que la puerta de la tienda se cerró detrás de él, dejó escapar un suspiro pesado. El pequeño timbre en la entrada marcaba que no había nadie más por el momento, y Rai aprovechó la oportunidad para sacar su teléfono del bolsillo.

El brillo de la pantalla iluminó su rostro mientras revisaba las últimas noticias. En medio de titulares banales y las típicas quejas sobre el tráfico parisino, un video llamó su atención. El título decía: "Aparecen nuevos individuos con habilidades similares a los recientes villanos en París." Su ceño se frunció mientras abría el enlace, y su frustración creció con cada segundo del video.

En las imágenes de baja calidad, se podían ver dos figuras moviéndose a una velocidad imposible, sus movimientos apenas capturados por la cámara. Rai reconoció inmediatamente el estilo de combate de Pierre, y aunque la calidad era mala, no pudo evitar notar la familiaridad en los movimientos de su compañero. El segundo individuo era más difícil de identificar, pero la similitud en las habilidades era inconfundible. Esto significaba que había más como ellos, otros que poseían habilidades innatas y no dependían de los Miraculous para obtener poder.

Rai apagó el video antes de que terminara, sintiendo una mezcla de rabia y preocupación. Lo que antes había sido un juego estratégico en su mente ahora comenzaba a desmoronarse. La aparición de estos nuevos individuos complicaba todo. Hasta ahora, el equilibrio de poder había sido manejable; conocían las reglas, sabían a qué atenerse. Pero ahora, con la llegada de más seres con habilidades similares, el juego se tornaba impredecible.

Mientras su mente divagaba, un suave carraspeo lo devolvió a la realidad. Madame Dupont había salido del almacén, sosteniendo un par de bolsas con harina. Ella lo miró con una sonrisa amable, pero con un destello de cansancio en sus ojos.

—Rai, ¿todo bien? —preguntó, su voz llena de genuina preocupación.

Rai, con su expresión cuidadosamente neutral, asintió y guardó el teléfono en su bolsillo.

—Sí, Madame Dupont, todo bien. Solo estaba revisando las noticias —respondió con su tono habitual, aunque su mente seguía zumbando con pensamientos más oscuros.

Ella le devolvió una sonrisa y colocó las bolsas de harina en la mesa.

—Esos malditos villanos siguen en las noticias. Es una lástima lo que están haciendo con esta ciudad —comentó mientras se limpiaba las manos en el delantal.

Rai asintió, forzando una sonrisa que no llegaba a sus ojos.

—Sí, es realmente lamentable. La ciudad está en un estado de caos con todo esto.

Madame Dupont suspiró, sacudiendo la cabeza con tristeza.

—Solo espero que nuestros héroes puedan arreglarlo antes de que las cosas empeoren.

Rai no pudo evitar sentir una punzada de ironía ante esa declaración. Si ella supiera la verdad, si comprendiera que los "villanos" no eran simplemente una amenaza externa, sino parte de un plan más grande y más intrincado del que los héroes ni siquiera sospechaban... Pero no, Madame Dupont estaba mejor en su ignorancia.