PERFUME A CELOS •IAG•

Capitulo 9

"Iván"

Narra Ivan (tiempo pasado)

Me encontraba perplejo por las acciones de Stefanya, sin saber que decir o hacer. Por un momento la sentí tan cerca, y después nuevamente lejos, muy lejos. Desde que pasamos esa noche en hotel, verla dormir, admirar su rostro angelical que para nada me engañaba, se que estaba despierta, se que sintió mi roce, y se también que sentía lo mismo que yo.

Pero me entraban muchas dudas, ¿por qué no me detuvo? Si realmente me odia, porque me dejó  por qué cedió a tanto. Porque me da alas para luego quitármelas. Todavía me pregunto con qué fin le dijo a las mujeres que había llevado a mi casa, que era la señora de esa casa. Miles de preguntas, y cero respuestas.

Al verla subir molesta a la habitación una vez estando en La sierra se sintió como cientos de navajadas en el pecho, ¿por qué quería huir? Porque estaba tan aferrada a Leonel, es el hombre el cual hoy en día quiero eliminar del camino, no lo quiero cerca de ella, Stefanya es mía y siempre lo será.

-Iván, mijo que sorpresa —Dijo Ismael al verme llegar hasta donde se encontraba reunido con mis hermanos y la familia de Fany.

-¿Y mi hija? ¿Qué pasó? —la madre de Stefanya se puso de pie junto a su esposo llegando hasta donde me encontraba—, ¿por qué traes esa cara?

-No pasó nada, ella ya se subió a su habitación el camino fue muy cansado, salúdenme a mis hermanos mañana hablamos —y sin más me di media vuelta por último echándole un vistazo a los presentes, quienes se encontraban hablando entre ellos alegremente.

No se porque no fui capaz de decir la verdad, no es tanto las amenazas o furia de Stefanya que me asustan. Si no, que algo pase. Que la situación empeore y no me favorezca, no quiero que se valla y eso es evidente, pasaron muchos años desde la última vez que la vi, y desde entonces cada noche me recordaba a ella.

Me fui a mi habitación pasando por la de Stefanya, con unas ganas inmensas de llamar a su puerta y estar con ella, besarla, dormir con ella como esa noche en el hotel. Pero era imposible. Ella me odia por el pasado, y eso que todavía no sabe toda la verdad, y es preferible que así siga.

-Valla regresaste más pronto —Alejandra me recibió cruzada de brazos mientras me miraba fijamente desde la cama. Aunque no éramos nada formalmente, me hacía compañía, desde lo que pasó hace unos años, ella se había encargado de por lo menos intentar llenar un vacío que misteriosamente yo tenía.

-Solo iba a lo que iba —respondí cerrando la puerta a mis espaldas y caminando hasta el pequeño sillón para dejarme caer y poder deshacerme de mis zapatos.

-¿Por qué te peleaste con ella? —la mire brevemente para volver a desviar mi mirada suspirando abruptamente.

-No sé de qué hablas —respondí sin más. La escuché bufar y cerré mis ojos con fuerza, lo último que quería era otra discusión.

-No me haces tonta Iván, por algo llegaron a esta hora y enojados, ¿que pasó?

-Alejandra no pasó nada, ella se molestó por cosas que nada que ver, nada importante..

-Iván tú crees que te voy a creer, desde un principio no me parecía que te fueras con ella —musitó molesta poniéndose pie sin apartar su mirada de mi—, dime ¿por qué esta molesta?