Mision 10: Parque de diversiones.

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- ¡Wow! - Los tres niños se sorprendieron de lo grande que era el parque, era la primera vez para todos en que iban a un lugar así.

-Muy bien niños, ¿A cuál vamos primero? - Kanae les regalaba una tierna sonrisa, esperando a que los niños terminarán de pensar en donde empezar su diversión.

-Ese.

Señalaban a un juego de patitos giratorios, viendo que algunos niños se reían y otros estaban mareados. Él que se iba a negar era Sanemi, pero su esposa ya lo había arrastrado a el juego mecánico.

Los cinco entraron a uno de los patitos, esperando a que todos se pusieran el cinturón de seguridad.

-¿Cómo lo hacemos girar? - Tanjiro tenía la curiosidad de hacer girar al patito.

-Este volante hace que gire, cuando la escuchen la música empezar, trataremos de girarlo los cinco.

-Cariño, ¿segura que es buena idea que estemos todos juntos?

-No pasará nada Nemi.

Kanae quería tranquilizar a su esposo, el cual estaba más pálido que de costumbre, temiendo que se fuera a marear.

Los niños trataron de mover el volante, pero no podían ni los tres juntos teniendo una buena coordinación, la música empezó y el movimiento de girar comenzó. Veían que otros niños se divertían con sus padres, ellos ansiaban que sus padres estuvieran en ese momento.

Por otro lado, Shinobu se encontraba examinando algunos antibióticos, el período de gripa estaba aumentando, tenía que estar prevenida en que sus reservas no se terminarán.

Y de vez en cuando miraba a sus venenos que iban evolucionando con las horas, su jefe le exigía mucho más en esos días antes de las fiestas por si había alguna emergencia mientras estuvieran de descansó.

Ella amaba mucho sus dos trabajos, le gustaba ayudar a las personas y también, hacer que el mundo estuviera fuera de peligro para sus hijastros.

Pensó en ellos en un momento, imaginando que se estarían divirtiendo con su hermana mayor y su cuñado. Esperaba que ninguno ocasionará algún problema, ella siguió con su trabajo, faltaba una hora y media para que pudiera comer algo. En ese lapso trataría de contactarlos para saber cómo les estaba yendo.

Se mal decía de no haber ido a ese parque de diversiones, recordaba las veces en el pueblo donde vivieron ambas hermanas, las incontables ferias que llegaban en cada época del año.

Su respuesta llegó al ver una foto de todos antes de subir al juego mecánico de patitos, ella estaba más tranquila, tocando la pantalla de su celular para reenviar esa foto a su esposo.

Quería que también supiera que sus hijos se estaban portando bien y lo más importante, era que se estaban divirtiendo con sus tíos y prima.

-Shinobu-san, el jefe te llama.

-Si.

Volviendo al parque de diversiones, al saber que había parado el juego pero su patito aún seguía girando, los niños junto a la mujer se estaban riendo de la adrenalina. Pero el pobre hombre tenía su alma pendiendo de un hilo, también con las ganas de vomitar.

Bajando con cuidado los niños junto a la mujer, ellos preocupados por el hombre que se encontraba en un bote de basura vomitando. Al terminar se empezó a sentir mal, pero no lo dejaron descansar ya que recorrieron desde la montaña rusa, hasta llegar al juego llamado sillas voladoras.

Sanemi se sorprendía que a su corta edad ellos estuvieran divirtiéndose y no tuvieran miedo. Pero, Kanae seguía en su misión de saber algo sobre el esposo de su hermana, tenía que actuar.

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⏰ Última actualización: Sep 10 ⏰

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The spy and the assassin. 🦋🌊💕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora