Nuestra historia juntos

Una pequeña visita

Nuestra pequeña pareja se despedía, pues darling tenía que ir por un asunto familiar, al igual que sus hermanos, sus parejas se estaban despidiendo de ellos y deseándoles un buen viaje, al parecer, los boletos habían sido ya comprados como parte del acuerdo para que los tres estuvieran juntos para la lectura del testamento.

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Solo había pasado un día desde que su prometida había ido con sus hermanos a parís, la sola idea de que tenía que ir al otro lado del continente le hacía poner de nervios, pero tenía que calmarse y saber que todo estaría bien, pues no había ido sola y saber que estaría más que a salvo, lo llegaba a calmar, aunque sea un poco.

Sentado sobre el sillón individual, leyendo y con una taza de café sobre la mesita de centro, era como ford se encontraba mientras el sonido del jazz sonaba por toda la sala.

El reloj marcaba las 7 de la noche cuando el sonido de un pequeño golpeteo en la puerta se escuchó.

-eh... ¿quién podrá ser a esta hora? -al ver por la mirilla de la puerta, supo quién era la persona al otro lado de la puerta.

-hey cerebrito

-stan ¿qué haces aquí? -abrazando a su hermano y haciéndolo pasar.

-solo pase a visitar a la pareja favorita de américa-estando ya adentro en la sala mientras su gemelo cerraba la puerta tras él.

-¿y karla, porque no vino contigo?

-esta con su madre en un viaje de spa que gano en un concurso

-ya veo

-en fin...-dijo mientras iba a la cocina y tomaba un vaso con agua del grifo- ¿y tú? Que me cuentas poindexter

-nada interesante, al igual que tú estoy solo por unos días

- ¿por qué?

-mi pequeña tuvo que ir a parís por un asunto familiar-dijo mientras dejaba escapar un leve suspiro-y sinceramente no se si pueda estar bien sin ella, hace poco que llamo, pero por la diferencia de horario no pudimos estar más tiempo...

-y supongo que las llamadas a larga distancia son algo baratas ¿no?

-eso no me interesa...-tomando una de las fotografías que había sobre la credenza-con tal de escuchar su voz...

Stan al ver a su hermano en ese estado, solo pudo pensar en algo que tal vez lo distraería, pues al igual que él, también quería estar cerca del amor de su vida.

-qué te parece si salimos

- ¿salir?

-claro torpe.... debe de haber algún bar por aquí cerca

-no lo sé...

-vamos cerebrito, llama a fids y dile que también ira con nosotros

Ambos hermanos salieron del edificio, el auto de stan estaba estacionado a pocos metros del edificio, pues ahora los dos irían por su amigo a su casa e ir a salir a tomar algo.

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Estando ya los tres sentados frente a la barra de un bar, era como estaban bebiendo de lo más tranquilo.

-sigo sin creer que te hayas casado antes que tu hermano-decía fids mientras le daba un pequeño sorbo a su bebida.

-es cierto, aunque-dando un buen trago-fue algo sencillo

-te casaste en una capilla en las vegas, stan

- ¡¿en las vegas?!-dijo fids mientras veía a stan algo incrédulo.

-fue algo inesperado, pero luego de eso, hicimos otra ceremonia aún mejor-decía mientras recordaba su boda, la cual había sido en portland, en una ceremonia, que, aunque sencilla, había sido muy especial para ambos.

-solo espero que tu primera esposa no se entere de que te casaste dos veces, una en las vegas y la segunda boda en Oregón...-decía ford mientras tomaba de su vaso y tratando de contener su propia risa.

Al momento de escuchar a su hermano, stan no pudo evitar dar un escupitajo, pues esperaba que su hermano no recordara a su "primera esposa".

- ¿primera esposa?

-FORD...-dijo algo irritado y avergonzado.

-si.... así como lo ves, el sujeto ya tenía esposa

-cierra el pico, nerd

-siento pena por lo que dirá su primera esposa si se entera-con una tristeza fingida era como estaba hablando. El pobre stan no podía siquiera alzar la mirada pues su hermano sabía quién era.

- ¿y se puede saber quién era? -la curiosidad lo estaba consumiendo y viendo a stan, era que estaba aún más interesado.

-solo digamos que era una mujer muy alta y que yo fui testigo en su boda

Las risas eran algo que no podían faltar en esa noche,,,, después de todo era noche de hombres.