Noah
Estoy en la habitación de Annie y Aubrey. Aubrey está en el armario, buscando que ponerse entre tanto bikini de marcas que ni yo sé como se las puede permitir. Bueno, la verdad es que no las compra, se las regalan gratis. Y se lo merece. No podría estar más orgulloso de ella.
-¿Cuál me pongo? -Pregunta, enseñándonos uno negro que se le tapa bastantes partes del cuerpo y uno rojo diminuto.
¿Cuál tiene que ser?
El rojo, obviamente.
-El rojo -Digo, sin pensármelo dos veces.
-¿Por qué ese? -Pregunta mirándome.
-Porque es el más pequeño -Por un momento me olvido de que tenemos compañía. Es que cuando estoy con ella es como si solo estuviéramos nosotros dos.
Aubrey se sonroja y Annie carraspea.
-Bueno, yo mejor me voy al comedor con los demás -Añade Annie levantándose de la cama.
Antes de salir de la habitación le guiña un ojo a Aubrey y ella pone los ojos en blanco.
-Qué pervertido estas hoy. ¿Qué te has tomado?
-Nada. Pero si te veo en bikini y encima en uno diminuto lo dejo todo.
-Ya lo veo -Contesta riéndose-. ¿Me dejas cambiarme?
-Claro -Asiento con la cabeza me levanto para cerrar la puerta.
Hoy pasamos el día en la playa.
Camino hacia la isla de la cocina, donde Ethan esta comiendo una galleta.
Joder, un día de estos le da diabetes.
-Tío, estas galletas están buenísimas -Me dice, pegándole un bocado.
-Es que yo no entiendo como no engorda el gilipollas -Dice Aubrey detrás mío. Me giro y esta preciosa. Bueno, siempre lo está, la verdad.
Lleva una camisa blanca, el bikini rojo y unos shorts tejanos.
No se cuantos minutos me quedo mirándola. Pero más de la cuénta. Y todo el mundo que está en el salón se está dando cuenta.
Aparto la mirada rápidamente, antes de hacer otra cagada.
-¿Vamos? -Pregunta Stella para romper la incomodidad.
-Sí -Acepto-. Vamos.
Salimos a la terraza y bajamos las escaleras. Aubrey entrelaza nuestros brazos. Como me gusta que haga eso. Estoy así con ella disfrutando el momento. Aunque el momento no dura mucho. Y ese no dura mucho es llamado Annie.
-¡Carrera! -Grita corriendo y tirando de Aubrey y de mi.
Y como no me queda otra, también corro. Y al final gano yo.
-Puto Noah -Dice Annie.
Aubrey rompe a carcajadas y me da un abrazo, rodeandome la cintura.
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El deseo de amar para siempre [TE AMARÉ POR SIEMPRE #1]
Romance¿Y si tu sueño de ser modelo se cumple? ¿Y si te tendrías que mudar a Australia por trabajo? Aubrey Henderson no ha salido de la gran ciudad jamás. Noah Johnson siempre ha vivido en el bonito pueblo de Australia, Lakes Entrance, con sus mejores amig...