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cap 65 y 66

Capitulo 65
Bombshell

"Está bien, entonces, ¿qué tienes que pueda ayudarme esta vez? Supongo que conoces mi situación actual dentro de la familia", dijo indicando que había aceptado el trato.

"Primero te diré algo que te ayudará a no caer en la misma situación en la que estás ahora por tercera vez" dijo Aron y se detuvo por un breve período para crear suspenso.

Cuando estuvo seguro de que Rina estaba concentrada, dijo: "El jefe de tu equipo de seguridad está trabajando para tu hermano". Aron fue directamente con un uppercut. Pero quiso explicarse un poco más, así que agregó: "No trabaja para él en sí, pero le informa de todo lo que haces".

A pesar de estar profundamente perturbada por la noticia, Rina ocultó sus emociones y esperó pacientemente a que Aron explicara su razonamiento para creer que lo que decía realmente estaba sucediendo.

Ella no se apresuró a creer todo lo que Aron decía sin pruebas significativas que respaldaran sus afirmaciones.

En lugar de continuar con su explicación, Aron sacó su teléfono de su bolsillo y se lo entregó a Rina.

Ella lo recibió y se quedó mirándolo sin decir nada, queriendo saber la razón por la cual le dio el teléfono.

Después de mirar la pantalla del teléfono aún bloqueado por un rato y cuando no pasó nada, Rina preguntó con un dejo de enojo en su voz: "¿Estás jugando conmigo?".

Ella tuvo ese arrebato porque la persona a quien Aron le dijo que estaba traicionando era uno de sus guardaespaldas de mayor confianza que había estado con ella desde sus años de escuela secundaria.

"Ten un poco de paciencia, ¿puedes?" dijo Aron e inmediatamente el teléfono comenzó a reproducir la grabación de una llamada telefónica que había tenido lugar momentos después de que Rina entrara al edificio.

La grabación continuó mientras Rina escuchaba en silencio, estupefacta. Aron la observaba atentamente, con expresión indescifrable.

"¿Con quién se encuentra?", preguntó una voz al otro lado de la grabación.

"Todavía estoy tratando de averiguar quién es esa persona, ya que llegó antes que nosotros", respondió la otra persona en tono respetuoso y deferente. "Le pediré al hotel que nos entregue las imágenes de él para que podamos encontrar sus datos".

Hubo una pausa en la grabación y Rina casi pudo oír a la mujer del otro lado de la línea hirviendo de impaciencia. "Necesito todo el informe de la reunión para el final del día", espetó.

La otra persona dudó un momento y luego respondió: "Sí, señora. Haré lo que me orde..."

Pero antes de que la respuesta pudiera completarse, la llamada finalizó abruptamente, sin dejar ninguna duda de que la mujer del otro lado de la línea tenía poco o ningún respeto por la persona con la que estaba hablando.

El rostro de Rina estaba marcado por la decepción y la incredulidad al escuchar la grabación de audio. Reconoció las voces de inmediato: era una conversación entre su guardaespaldas principal y la secretaria de su hermano.

Aunque sabía que su hermano observaba cada uno de sus movimientos, no esperaba que su guardaespaldas principal fuera quien la estuviera vigilando por él.