21 | Informe

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Punto de vista de Martina
Nuestra vida con Héctor ha cambiado radicalmente y para mejor. Nuestra relación floreció y, mientras tanto, descubrí que estaba embarazada de otro hijo. El sexo del bebé sigue siendo un misterio, porque decidimos saber si será niña o niño recién en el momento del nacimiento.

Celebramos nuestra boda en la catedral más prestigiosa de Barcelona, ​​un evento que quedará grabado para siempre en nuestros corazones. Mis padres están encantados con nuestra relación y, sobre todo, ilusionados por la inminente llegada del nuevo miembro a nuestra familia. Después de la boda, Héctor y yo nos mudamos a Italia, a una hermosa casa de vacaciones en Capri, no lejos de mi ciudad natal. El cambio de ambiente nos vino bien y nos permitió disfrutar de una vida nueva, lejos del caos y las presiones cotidianas.
Nuestro pequeño Soleil ha crecido mucho y ahora habla muy claro. Se ha convertido en una auténtica conversadora, como su madre. Héctor espera que nuestro segundo hijo sea otra niña, mientras que yo no tengo preferencias particulares, siempre y cuando el niño o niña esté sano. La alegría de esperar un bebé es inmensa y la espera se vuelve cada vez más emocionante.La fecha de parto se acerca rápidamente y por fin sabremos si nuestro bebé será una niña llamada Victoria o un niño llamado Edoardo. Mi corazón rebosa de alegría ante la idea de tener pronto nuestro pequeño tesoro en mis brazos.

Después de unos días

Acabo de dar a luz a Victoria Aria Fort Torres, una hermosa niña de ojos azules y mucho cabello. Soleil está encantado de tener una hermana pequeña con quien jugar y Héctor no podría estar más feliz. Su corazón parece latir sólo por sus dos hijas.

- Mamá, quiero ver a Victoria - dice Soleil, sonriendo con los ojos llenos de curiosidad y amor. Héctor la levanta y la pone en la cama a mi lado.

- Mamá es hermosa - dice Soleil emocionada mientras observa maravillada a su hermanita.

- Me porté muy bien - dice Héctor, con una sonrisa orgullosa, dándose aires. Sólo lo miro.

- Vamos, estoy bromeando, te amo bebé - dice Héctor, abrazando a Soleil y haciéndola reír.En ese momento, la puerta de la habitación se abre de repente.

- Disculpe, ¿eres Martina Torres? - pregunta una enfermera con una amable sonrisa. Asiento.

- Estas flores son para usted - continúa la enfermera, entregándome un ramo de espléndidas peonías. Me giro hacia Héctor y veo que él también mira con curiosidad.

- ¿Fuiste tú? - Le pregunto a Héctor un poco sorprendido.- No - admite, sacudido por una expresión de decepción. El ramo de peonías va acompañado de una nota que dice:"Por la flor más bella que existe,Pablo Gavira."Sigo perplejo ante este gesto inesperado por parte de Pablo. Héctor, con una mirada entre incrédula e indignada, pregunta:- Pablo, ¿verdad? - y asiento en respuesta.

- Lo sabía – resopla Héctor claramente molesto.

- Llama a una enfermera, por favor - le pido amablemente a Héctor, quien inmediatamente contacta a Soledad, la partera.

- ¿Martina? ¿Todo bien? Soledad pregunta preocupada.

- Lleva estas flores a los niños enfermos - digo, intentando mantener una sonrisa serena.

- Como quieras – responde Soledad, aceptando el encargo con una sonrisa y llevándose las flores.

- No quiero a nadie más que a ti – le digo a Héctor, con una sonrisa sincera. Me besa suavemente, tranquilizándome y mostrándome lo importante que es nuestra familia para él. En este momento, rodeada del amor de Héctor y las alegrías de Soleil y Victoria, me siento plena y feliz, lista para afrontar lo que me depare el futuro.

¿Y Ahora? - Héctor Fort. (Versión Española)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora