¿Y Ahora? - Héctor Fort. (Versión Española)

19 | La prueba de paternidad

Punto de vista de Martina
Luego de dejar atrás el hospital, Héctor y yo nos aventuramos juntos a hacernos la prueba de paternidad. La tensión era palpable cuando nos dirigimos a la clínica para recoger los resultados. Ahora estamos en casa de Héctor y tengo en mis manos un sobre blanco que contiene el tan esperado veredicto. La pequeña Soleil está acurrucada en su cochecito, durmiendo plácidamente, sin darse cuenta del torbellino emocional que nos rodea.

- Héctor, ¿y si no tienes que ser el padre? - pregunto, mi voz es una mezcla de esperanza y miedo. La idea de una verdad diferente me angustia, pero trato de mantener la calma.

- Me distanciaré tanto de ti como de Soleil - responde Héctor con una seriedad que me hace temblar.

- Vivirás tu vida junto con el verdadero papá.- ¿Pero no me amas? - pregunto melancólico, mi corazón pesa con el miedo de perderlo, así como el miedo por el futuro de Soleil.

- Te amo demasiado, pero tu vida está muy ligada a la de Soleil - Héctor suspira, su rostro es una mezcla de tristeza y resignación.
Mi mirada se posa en la pequeña Soleil, que duerme felizmente en su cochecito. La verdad sobre nosotros está encerrada en ese sobre blanco. La tensión es insoportable.

- ¿Lo abrimos? - pregunto, tratando de reunir coraje.- Abrámosla - responde Héctor con determinación, su tono no permite titubeos.Sacamos el papel y lo leemos juntos. Reseña el documento:

"Durante el desarrollo de esta prueba se analizaron los marcadores genéticos presentes en el ADN de los señores Héctor Fort y Soleil Gavira Torres para determinar su parentesco biológico. El resultado de la prueba es positivo, confirmando que Héctor Fort es el padre de Soleil Gavira Torres."

- Eres el padre - anuncio con una sonrisa de alivio y alegría. El peso que sentía en mi corazón comienza a aliviarse.

- Lo sabía - responde Héctor con una leve sonrisa, su rostro se relaja.

- Ahora que la verdad ha quedado al descubierto, lo pagarán muy caro - Héctor suspira, su mirada se vuelve oscura y decidida.

- ¿Qué haremos primero? - pregunto, tratando de concentrarme en qué hacer ahora.

- Iremos a donde Pablo con una fotocopia de este documento - dice Héctor con convicción, mostrándome el papel que tiene en la mano. - Definitivamente querrá quemarlo.
Asiento, sabiendo que la batalla acaba de comenzar.

Punto de vista de Héctor
Nos dirigimos hacia la casa de Pablo con renovada determinación. Cuando llegamos, camino hacia la puerta y empiezo a tocar fuerte, mi voz se eleva hasta convertirse en un grito desafiante.

- ¡Idiota! ¡Sé que estás ahí! - grito, el ambiente está lleno de tensión y conflicto. Después de un momento de silencio, la puerta se abre lentamente y aparece Pablo, con su rostro expresando sorpresa y fastidio.

- ¿Héctor? ¿Qué haces aquí con mi hija? pregunta, su voz llena de irritación.

- Ella no es tu hija, Soleil. Hicimos la prueba de ADN, ella es mi sangre. - Afronto la verdad con frialdad y determinación. Quiero que Pablo entienda claramente que no tiene derechos sobre ella.

- ¡Dame esta tarjeta! - grita Pablo, su rostro se contrae en una mueca de ira.Le entrego el documento y mi rostro permanece impasible mientras lo rompe en pedazos. Su gesto es exactamente lo que esperaba.

- ¡Mierda! - exclama, mientras rompe el papel en mil pedacitos, su comportamiento patético e infantil.

- Haré todo lo posible para que Soleil sea mío - declaro con firmeza, mi mirada se vuelve hacia Martina, que sostiene a Soleil en sus brazos con expresión de preocupación y determinación.

Es guerra, Gavi.
Nuestro enfrentamiento apenas comienza y estoy dispuesto a luchar por mi derecho a ser padre de mi pequeña.