"El Dragón y su Destino" (omegaverse)

😏El Lazo Eterno ♾️

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El aire de Berk estaba impregnado con la frescura de la mañana, pero dentro del corazón de Hipo, una llama más profunda ardía. Las noches que había pasado junto a Chimuelo, ahora en su forma humana, habían sido reveladoras y llenas de emociones nuevas e intensas.♡ Sin embargo, un pensamiento persistente seguía rondando su mente: la naturaleza de su vínculo aún no estaba completa.

Desde que habían cruzado esa línea, Hipo no podía dejar de pensar en lo que significaba ser el omega de un alfa, especialmente en el contexto de su mundo, donde los lazos entre alfas y omegas eran más que simples conexiones emocionales; eran vínculos profundos y poderosos, marcados por el acto más íntimo.😏

Chimuelo, por otro lado, también sentía la presión de lo que estaba por venir. Aunque su amor por Hipo era indudable, había una parte de él que luchaba con el instinto de marcarlo, de reclamarlo completamente como suyo. La transformación en humano le había dado una nueva perspectiva, pero sus instintos de dragón, ahora mezclados con los de un alfa humano, lo llevaban a desear un vínculo más profundo con Hipo.💫🤭

Mientras caminaban juntos por los acantilados de Berk, el tema que ambos habían evitado finalmente salió a la luz.

🤎-Chimuelo... -comenzó Hipo, su voz vacilante mientras observaba el horizonte-. Hay algo de lo que necesitamos hablar.

Chimuelo se detuvo, girándose hacia él con una mirada inquisitiva.

🖤-¿Qué sucede, Hipo? -preguntó, aunque en el fondo ya sabía lo que venía.

Hipo tomó una profunda respiración, intentando encontrar las palabras adecuadas.✨

🤎-Sobre lo que pasó entre nosotros... sé que aún no hemos... completado el vínculo -dijo finalmente, sintiendo cómo su rostro se sonrojaba ligeramente-. Sé lo que significa ser un omega, y sé que tú... que nosotros... aún no hemos hecho lo que un alfa y su omega suelen hacer.

Chimuelo lo miró en silencio por un momento antes de acercarse, colocando una mano suave en la mejilla de Hipo.

🖤-Lo sé, Hipo -dijo con calma-. He pensado en ello, mucho. Pero también sé que este es un paso que debemos dar juntos, cuando estemos listos. No quiero apresurar nada, porque lo más importante para mí es que estés a salvo y feliz.

Hipo sintió una oleada de alivio y gratitud hacia Chimuelo. Sin embargo, también sabía que el tiempo se acercaba. La transformación de Chimuelo había traído consigo nuevas complejidades, y su propio cuerpo empezaba a mostrar señales de que el próximo celo no estaba muy lejos. Aunque su vínculo con Chimuelo era fuerte, no sería completo hasta que fuera marcado como suyo.

🤎-No quiero que lo evitemos por miedo -admitió Hipo, sus ojos encontrando los de Chimuelo-. Quiero ser completamente tuyo, Chimuelo. Quiero que nuestro vínculo sea eterno, como debe ser.

Chimuelo sonrió, un destello de amor brillando en sus ojos.

🖤-Entonces, cuando llegue el momento, lo haremos juntos -dijo-. No te preocupes por nada, Hipo. Estaré contigo en cada paso del camino.

La conversación dejó a ambos con un sentimiento de resolución. Sabían que no estaban solos en esto, y que enfrentaban lo que venía con el amor y la confianza que habían construido juntos.

Días más tarde, mientras exploraban un claro en el bosque, Hipo comenzó a notar los primeros signos de su próximo celo. Su cuerpo respondía instintivamente a la presencia de Chimuelo, y aunque podía suprimir sus impulsos gracias a su fuerza de voluntad, sabía que no podría hacerlo por mucho tiempo. Cada vez que Chimuelo estaba cerca, su aroma parecía más embriagador, más intenso, y Hipo luchaba por mantener la calma.