❝Roseanne Park odia las cosas del amor, y sobre todo, los novios. Su madre desea que tenga una pareja para que así sea feliz y deje de ser tan amargada, así que decide "alquilar" a una chica con una preciosa sonrisa, Lalisa Manoban, para que sea la...
advertencias: humor absurdo, chaelisa y otras parejas. capítulos cortos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Mamá, ¿Tú sabías que el hermano mayor de Lisa tiene cáncer?
Su mamá se atragantó con el café que estaba tomando a la hora del desayuno, sorprendida ante la pregunta de Rosé, para luego mirarla de forma incrédula.
Pero a Rosé no la engañaba: había aprendido a leer las emociones de su progenitora con facilidad después de que su padre muriera y quedaran solas.
Así que podía ver la mentira en la expresión de su madre, el repentino desconcierto y miedo que la delataba.
—¿Su hermano? —su mamá terminó de tomar el café de golpe, evitando mirarla—. No, claro que no.
Rosé entrecerró los ojos.
—La otra vez le preguntaste cómo estaba —se inclinó un poco sobre la mesa—. Mamá, no soy idiota —bajó un poco la voz—. ¿Conocías de antes a Lisa?
Su mamá abrió la boca, ofendida.
—¿Qué quieres decir con eso, Roseanne?
—Quiero decir que esa maldita página de inter-...
—¡Yujuuuuuuuuuuuuuuuu!
Lisa entró a la cocina, sonriente hasta que notó el ambiente tenso entre la familia. Se removió, incómoda, mirando para todos lados.
—Uhm, yo quería...
—Nos vamos —Rosé agarró su mochila, dirigiéndole una mirada de advertencia a su mamá—. Conversaremos después.
Tomó la mano de Lisa y la arrastró hacia fuera, quien apenas tuvo tiempo de hacerle un gesto de despedida a la mujer. Se dejó llevar por Rosé, aunque podía notar el agarre apretado sobre su mano, mas no dijo nada hasta que estuvieron en la calle y empezaron a caminar.
—¿Pasa algo, ardillita? —preguntó Lisa preocupada.
—No —relajó su agarre un poco antes de pasar su brazo sobre la cintura de Lisa—. No es nada, bebé.
No iba a preguntarle sobre aquella horrible duda que la carcomía por dentro, que no la dejaba dormir por las noches. No podía simplemente detenerse a interrogar a Lisa, no cuando estaba preocupada por el estado de su hermano, cada vez peor.
A veces, hasta creía que tampoco quería saber la respuesta. ¿Y si no le gustaba?
—Estás muy cariñosa. —comentó Lisa de pronto, besándole la mejilla.
—¿Quieres que no lo sea? —preguntó Rosé estoica.
—Está bien así —Lisa la abrazó, sonriendo—. Te quiero mucho, Rosie.
—Mhn.
Lisa trató de no darle importancia mientras seguían caminando en silencio.
Su móvil sonó en señal de que había llegado un mensaje, y Rosé lo revisó, notando que era de Minnie.
—Mierda. —murmuró con pesadez.
—¿Qué pasa? —preguntó Lisa.
Rosé mordió su labio inferior, molesta.
—Minnie me acaba de avisar que al parecer TaeHyung y JiSoo terminaron —gruñó con una mueca de desagrado—. No tiene detalles, pero incluye a cierta chica hiperactiva que las dos conocemos.
—¿Qué? —Lisa se detuvo—. TaeHyung y JiSoo no pueden terminar, ellos no... ¡Iban a cumplir los dos años de pareja!
—Lili, cálmate —pidió Rosé—. No nos podemos meter entre ellos, no es asunto nuestro.
—¡Es TaeTae! —Lisa pateó el suelo con rabia—. ¡A TaeTae le gusta JiSoo desde que tenía quince años!
—Lili —murmuró Rosé suavemente—, a veces las cosas son así. A veces el amor se acaba y no se puede hacer algo para evitarlo.
Lisa la miró en silencio unos segundos.
—Yo nunca dejaría de quererte, Rosé. —dijo sonriendo tristemente.
Nunca dejaría de quererte, aunque eso fuera mi perdición.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
