☆ Capítulo 5: Bad Valentine ☆ Parte 2

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POV Lucía

Estaba muy nerviosa. Me miré al espejo por última vez, tratando de decidir qué atuendo de los que había seleccionado era el indicado. Sabía que no era una cita formalmente como tal, pero aun así quería lucir lo mejor posible. Al final, me decidí por un vestido negro sencillo y un abrigo beige. Me preparé mentalmente para decirle al rubio todo lo que había deseado confesarle desde que supe que despertó y que seguramente el no esperaba. Sin más me encamine al lugar, iba tarde y no quería hacerlo esperar.

[...]

Apenas baje del taxi lo vi. Estaba recostado en su auto mirando su celular. Vestía una camisa blanca y un pantalón azul que lo hacían lucir realmente bien. Nada demasiado formal pero tampoco deportivo. Me había escrito y había llegado unos minutos antes. Varios minutos antes en realidad.

El restaurante, era poco conocido. Elegante, pero muy discreto, así que no había mucho peligro de ser vistos.

— ¿Esperaste mucho? —Llamé su atención y él volteó a verme. Fijo sus ojos en mí durante varios segundos y me sentí nerviosa ante su mirada en mi.

— No— dijo sin despegar sus ojos de mí. — Perfecto, entonces vamos, rubio— dije tratando de dejar aquellos nervios atrás y tomándolo del brazo e ingresando al lugar.

Por dentro, el restaurante me sorprendió aún más. Era más bonito de lo que aparentaba. Tenía una decoración elegante y moderna. Cristian no se equivocó al recomendármelo.

Max, siempre había sido un caballero conmigo; sin embargo, ahora sus atenciones se sentían aún más especiales. Me hacían sentir un cosquilleo interior. Él me ayudó a retirarme el abrigo que traía suavemente y ese leve contacto erizo mi piel. Traté de disimular las sensaciones que está produciendo en mí, sonriéndole nerviosa. Él incluso me dio sugerencias de qué ordenar. Una vez que ambos ya habíamos seleccionado nuestros platillos y el mozo se retiró, nos quedamos en silencio.

— ¿Te gustaron tus vacaciones en la playa? — dije tratando de aligerar el ambiente y él me sonrió, conociendo lo que hacía. Romper aquel silencio.

— Australia, es un buen lugar para relajarte. Aunque no es divertido si estás solo— respondió bebiendo de su copa de vino.

— No hubieras estado solo si no hubieras huido— me atreví a decir acusándolo y lo vi perder un poco su entusiasmo. Me miró culpable.

— Siento mucho eso, Lucía, sé que te decepcioné. No lo merecías, después de todo lo que hiciste por mi. Pero yo —suspiró antes de continuar— necesitaba tiempo para pensar. Para estar a solas. Ya sabes, perdí el campeonato y estuve inconsciente mucho tiempo.

Mentía. Sabía que esa no era la razón principal. Él tenía un tic de cerrar una de sus manos en un puño cuando mentía y eso lo delataba. Aunque reconocí su mentira, no quise cuestionarle más. En ese momento llegó el mozo con nuestras órdenes.

— Tengo curiosidad. ¿Cómo llegaste a trabajar en Red Bull? — dijo después de comer un poco de su pasta, mirándome expectante por mi respuesta. No iba a decirle que Cristian sabía cómo me sentía hacia él y me estaba ayudando, así que decidí bromear con ello.

— Horner me adora, así que él me llamó. Tengo trato preferencial— dije riendo por ello y él también lo hizo negando. Sentí por un momento que volvíamos a ser los de antes. Sin embargo, era una ilusión. Su expresión cambió cuando realizó su siguiente pregunta.

— ¿Charles, está de acuerdo con eso? — me miro esta vez sin una sonrisa de por medio.

— Es una decisión mía y no te adelantes, hablaremos  sobre él después— contesté rápidamente y traté de decirle con mi mirada que no se preocupará por ello. Durante unos minutos nuevamente nos quedamos en silencio mientras degustábamos nuestros platillos hasta que volvió a hablar.

Rewrite The Stars  (LIBRO 2) [MAX VERSTAPPEN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora