Rewrite The Stars (LIBRO 2) [MAX VERSTAPPEN]

☆ Capítulo 6: More than words☆

La canción del Cap y disfruten

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POV Max

Era un completo idiota. No podía dejar de sentirme culpable al recordar cómo Lucía se había ido enojada. En otra circunstancia, podría haber dicho que me encantaba verla así por la determinación que demostraba, pero no cuando era por mi culpa. Sabía que no solo la había hecho enojar, sino también sentir mal.

Me aseguré de que tomara un taxi seguro, siguiéndola a distancia. Intenté contactarla para asegurarme de que llegara bien, pero no me respondió. No la culpaba. Tuve que recurrir a Lando para que hablara con ella. ¿Quién iba a pensar que el mismo chico que me había pedido que me alejara de ella unos meses atrás, ahora no quería ni hablarme debido a las tonterías que estaba haciendo? Aceptó confirmarme que Lucía estaba bien solo si hablaba con él. Y ahí estábamos, en mi jet, regresando a Mónaco antes de la primera carrera.

— Solo acepté venir contigo porque realmente quiero golpearte, Max Verstappen —dijo Lando con seriedad—. Pensé que Charles era el único imbécil con el que se topó Lucía, pero ahí vas tú, complicándole las cosas aún más. —Intenté defenderme, pero él siguió—. ¿Qué demonios pasaba por tu cabeza cuando dijiste que habías invitado a Kelly a la playa? Estoy seguro de que no es verdad. Si me dices lo contrario, me bajaré de aquí en este momento —dijo, tocando el cinturón de seguridad de su cintura en señal de amenaza.

— No la invité, lo juro —dije finalmente, pidiendo que me dejara continuar—. Solo quería algo que la alejara. Lando, ella está confundida. Ella no me ama; ama a Charles, y lo sabes. Tú mismo me lo dijiste varias veces antes.

— Y ahí vas de nuevo, actuando como un idiota. Acepto que te lo dije, pero eso fue cuando estaba con él, antes del accidente. Max, puedes creer lo que quieras, pero no la viste llorar mientras estuviste en cuidados intensivos. Ella te cuidó con dedicación cada día. Apenas salía para comer o cambiarse. Pasó Navidad contigo. Además, soportó las malas miradas de tu padre todos los malditos días allí. Si crees que eso es estar confundida, quisiera que una mujer siquiera estuviera confundida conmigo la mitad de lo que ella está contigo.

Sabía que ella había estado a mi lado cada día que estuve en coma, pero no esperaba que hubiera pasado por todo eso. Ahora me sentía el peor idiota del mundo por siquiera haber mencionado a Kelly, sabiendo lo delicado que era el tema entre nosotros. Sin embargo, aunque me dieran mil razones, mi corazón seguía temiendo aceptarlo. Tenía miedo de creer en algo que podría ser solo una ilusión y terminar nuevamente herido.

— Tú no lo entiendes, Lando —suspiré, agotado, mirando por la ventana del avión—. La amo más que a nada, pero tengo mucho miedo. Miedo de que esto no sea real. Nunca esperé que ella me amara de vuelta. Me dejó claro antes que siempre sería Charles. No quiero que un día despierte y vuelva a ser él. No podría soportarlo.

Por primera vez, Lando relajó su mirada y me miró con comprensión.

— Max, sé que tienes miedo de aceptar sus sentimientos y que todo esto es nuevo para ti, pero ¿no crees que vale la pena intentarlo? Ella te eligió a ti y, de hecho, ahora ha aceptado un trabajo temporal, dejando quizás otras opciones para estar cerca de ti. Te ha confesado lo que siente sinceramente —suspiró antes de continuar—. No puedo obligarte a hacer nada, pero quiero que sepas que, si sigues con esa actitud, solo lograrás que ella se arrepienta de haberte elegido. Te ama, Max. Solo mira en sus ojos y lo sabrás.